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De poesía y poetas

José Rubén Romero, el célebre autor de “La vida inútil de Pito Pérez’’, cultivó durante un tiempo el hai-kai, especie de pequeño poema cuyo género trajo del Japón, y puso de moda en México, el poeta José Juan Tablada. De variada inspiración -y calidad- eran los hai-kais de Romero. De memoria cito algunos:


        
Cura:
Búho disfrazado de paloma:
con una mano bendice
lo que con la otra toma.
   
Otro:
 ¡Ay, si querían volar
 los senos de aquella niña
 al verse en un palomar!
        
Y uno más:
Buscando huevos en el gallinero un día
me topé con los senos de mi prima.            
        

El Presidente Obregón, hombre de travieso ingenio que más de una vez hizo objeto de sus bromas al creador de Pito Pérez, solía decir al hablar de la obra del michoacano:

-Romero tiene cosas muy buenas, pero la mejor de todo son los senos de su prima.

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En 1934 Federico García Lorca escribió su preciosa comedia “Doña Rosita la soltera, o El lenguaje de las flores’’.

Durante el tiempo que le tomó la escritura de esa obra tuvo sobre su mesa de trabajo una caja de cristal que contenía seis o siete mariposas del Brasil con grandes alas de espléndidos matices irisados.

-Verlas me sirve de inspiración para la obra que ahora escribo -decía-, y pone colores en mi pluma.

Esas mariposas se las regaló a García Lorca don Alfonso Reyes, el regiomontano ilustre, quien, al paso del poeta granadino por Río de Janeiro, se las llevó hasta su camarote en el barco.

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Muy sabios, e investidos con el divino don de la prudencia, son los habitantes de Tlacotalpan. Los visitantes les preguntan:

-¿De modo que aquí nació Agustín Lara?

Y ellos no contestan:

-Sí.

Tampoco replican:

-No.

Responden con seriedad parsimoniosa:

-Eso dicen.

Así ni niegan ni afirman, y aunque se haya probado que el Músico Poeta es del Distrito Federal, ellos, con su respuesta ponderada, no mienten, pero tampoco atentan contra uno de los recursos turísticos de la región. Por su parte el Flaco de Oro aseguraba ser de Tlacotalpan. A fin de que nadie le discutiera esa afirmación solía declarar:

-Mi mamá siempre me dijo que yo nací en Tlacotalpan, y el que niegue eso está llamando mentirosa a mi mamá.