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Los poderosos y su salud mental
Cuando, desde la niñez, alguien se ha acostumbrado a cumplir sus caprichos, está convencido que es superior; merecedor privilegios. Le produce placer despreciar a los demás, conseguir cuanto quiera, manipulando cualquier situación para obtenerlo, sin importar los medios, su lema es; “más para mí”.
El poder causa adicción insaciable y nos expone a la tentación de pisotear las necesidades de otras personas, en forma inmisericorde por la “creencia” de que el poder da derechos…
Cuando se ha cruzado la línea de cada valor ético que sostiene la integridad. Cuando se ha degustado la impunidad, el último recurso es cubrirse unos a otros.
Dado que los seres humanos son interesantes y peligrosos; —tienen impacto sobre nosotros— para bien o para mal. Es preciso conocernos a nosotros mismos y observar el comportamiento de los demás.
El Eneagrama, es una tradición que se inicia posiblemente en Babilonia (2 mil 500 a.c.) y nos da el motivo para el estudio de los nueve tipos de personalidad, básica y complementaria, así como su ruta de integración y desintegración.
Cada personalidad tiene nueve niveles de desarrollo. En cada uno, pasan diferentes cosas; diferentes rasgos y mecanismos de defensa surgen y se combinan con los rasgos que ya existen.
Sanos. Nivel 1: (Nivel de liberación). Nivel 2: (Nivel de capacidad psicológica. Nivel 3: (Nivel de valor social) lo mejor de cada ser humano.
Promedio. Nivel 4: (Nivel del desequilibrio)… las opciones opuestas que ofrecen: el “diablito” y el “angelito”. Nivel 5: (Nivel de Control interpersonal), en este nivel la auto percatación se ha deteriorado en ensimismamiento; el ego se infla y los mecanismos de defensa se agravan aún más... Nivel 6: (Nivel de sobrecompensación) surgen características de egocentrismo creciente enfocado en el “tener”, vaciándose del “ser”. Convertirse en comprador compulsivo, ambicionar más; más y más “el fin justifica los medios”, o el perfeccionista enjuiciador etc.
Malsanos. Nivel 7: (Nivel de la violación), la persona emplea una táctica malsana de supervivencia, en un intento desesperado por auxiliar al ego que es atacado por una creciente angustia. Nivel 8: (Nivel del pensamiento delirante y conducta compulsiva), aquí el ensimismamiento se ha deteriorado en odio a sí mismo, e intentos de rehacer la realidad antes que sucumbir a ella. Nivel 9: (Nivel de la destructividad patológica), la persona está fuera de contacto con la realidad; está dispuesta a pasar por encima de los demás.
Todos los terrícolas tenemos nueve componentes en nuestra personalidad: Temor básico / Deseo básico/Motivaciones secundarias / Sentido de sí mismo/ Queja oculta /Mecanismos de defensa claves/ Vicio característico/ Virtud característica/ Gracia salvadora. la oportunidad de rectificar; iniciar un proceso arduo para convertirse en una mejor persona.
¡Decídete a ser feliz hoy!
@_A_lfonsina