Un hospital puede resultar lúgubre para los que están atrapados adentro, por lo cual una niñita decidió ponerle un poco de color de manera muy especial.

A Ella Tryon, de siete años, le diagnosticaron una alergia alimenticia severa en julio y estuvo en cama en el Rainbow Babies and Children’s Hospital de Cleveland porque su tratamiento exigía un tubo de alimentación, informó Today.

Mientras hacía reposo, Ella decidió que quería pintar un arcoíris, pero cuando mandó a su madre en busca de materiales, quedó decepcionada al enterarse de que al hospital sufría de una sería escasez de crayones.

“Le encanta colorear, pero los crayones estaban rotos y tirados en un cajón”, declaró a Today la madre de Ella, Jackie Tryon. “No estaban todos los colores, y le dije que la próxima vez que tuviésemos que ir al hospital, llevaríamos algunas cajas para donarlas”.

Pero Ella estaba decidida a volver al hospital con más que sólo algunas cajas. La niña deseaba asegurarse de que si los otros niños quisieran colorear un arcoíris para aliviar su estadía, nada se interpusiera en su camino.

“Ella quería que todo niño que ingresara al hospital tuviera su propia caja de crayones y pudiera quedársela para siempre”, declaró Tryon a Today.

Entonces, la familia empezó a contactar a amigos, parientes y feligreses. En tan sólo tres semanas, Ella ya tenía más de mil cajas de crayones para su proyecto, informó Today.

La iniciativa llegó a los oídos de las empresas locales, y la campaña de Facebook de Tryon llamó cada vez más la atención.

Con cada donación, crecían las aspiraciones de Ella.

“Cuando llegamos a las mil, cambió el objetivo a 5.000 cajas”, dijo Tryon. “Luego, dijo que quería juntar 10.000 cajas para Navidad”.

Ella no tuvo que esperar hasta diciembre para alcanzar su nueva meta. Para octubre, había juntado 13.000 cajas de crayones y tuvo que usar un camión con acoplado para enviarlas al hospital.

“La gente cree que los niños no pueden hacer la diferencia”, declaró Tryon a Today. “Pero ella lo logró. Hizo la diferencia más de 13.000 veces”.

Como si Ella no tuviera suficiente que hacer, su madre se aseguró de que su hija expresara su agradecimiento por toda la generosidad recibida. Ella decidió demostrar su gratitud con 13.000 notas escritas a mano para cada donante, cada una con un arcoíris.

“La acción altruista de Ella es un ejemplo para todos nosotros sobre cómo dar incondicionalmente puede causar un impacto muy grande”, declaró a Today la presidenta de Rainbow’s Hospital, Patti DePompei. “No nos alcanzan las palabras para agradecerles a Ella y la comunidad por su constante generosidad, que nos ayuda a brindar la experiencia hospitalaria más positiva a nuestros pacientes y familias”.

La próxima meta de Ella es juntar 5.000 cajas de crayones para el Hospital St. Jude. Pero cuando la cumpla, aún quedará mucho por hacer.

“Luego serán mil cajas para cada hospital infantil en EE.UU.”, declaró Tryon a Today.