Un adolescente de South Carolina sin antecedentes de problemas cardíacos ingirió tres bebidas con alto contenido de cafeína en el lapso de dos horas; posteriormente se desplomó en la escuela en abril pasado a causa de lo que el médico forense del condado calificó de “evento cardíaco inducido por cafeína”.
Davis Allen Cripe, de Chapin, South Carolina, murió dentro de las tres horas de haber consumido una Diet Mountain Dew, una bebida energizante y un café con leche. Tenía 16 años.

El apesadumbrado padre del adolescente está exhortando a los padres a hablar con sus hijos sobre el peligro de las bebidas energizantes, pese a que los funcionarios de salud enfatizan que no fue una sola bebida, sino la sobrecarga de cafeína derivada de consumir tres en el lapso de dos horas, lo que hizo detener el corazón de Cripe, según TheState.com. Y la misma combinación de bebidas en el mismo lapso no sería fatal para todos.

“Pueden haber cinco personas aquí y hacer todas lo mismo que hizo él ese día -beber más- y quizá no tener de ningún modo el mismo efecto en ellos”, dijo el Médico Forense del Condado, Gary Watts en una conferencia de prensa esta semana donde se dieron a conocer los resultados de la autopsia.

¿Cuáles son, entonces, los riesgos de la cafeína y cómo afecta el corazón? Y ¿son las bebidas energizantes singularmente peligrosas para los chicos? A continuación, qué deben saber los padres.

Los efectos de la cafeína
El presidente de la Asociación Forense de South Carolina dijo en USA Today que es la primera muerte relacionada con la cafeína que ve en el estado.

En otros lugares, empero, ha habido muertes atribuidas a los efectos de la cafeína. Un atleta y líder de su promoción en Ohio murió en 2014 después de ingerir cafeína en polvo, y las familias de varios jóvenes que murieron después de tomar bebidas energizantes han culpado a los productos, que generalmente se comercializan como una forma de mejorar el rendimiento atlético. El slogan de una de ellas, Red Bull, es “Red Bull te da alas”.

La oficina forense de Richland County dijo que probablemente Cripe murió a causa de una arritmia o pulso cardíaco errático, provocada por el exceso de cafeína consumida en un período breve. La arritmia puede implicar una frecuencia cardíaca anormalmente alta o baja, y afecta la capacidad del corazón para bombear sangre a todo el organismo, según la Cleveland Clinic.

Los síntomas incluyen una sensación de aceleración o agitación en el corazón, y sentirse mareado o aturdido. Antes de desplomarse, Cripe dijo a sus compañeros de clase que se sentía aturdido, informó The Washington Post.

Pero casi tres cuartas partes de los jóvenes estadounidenses consumen cafeína, en su mayoría sin consecuencias significativas para la salud y más del 80 por ciento de los estadounidenses consume cafeína todos los días, según la Food and Drug Administration (FDA).

La sustancia es producida naturalmente en los granos de café, las hojas de té y las vainas de cacao, y se sintetiza en laboratorios. Se la llama a veces la droga más común del mundo y normalmente consumir apenas dos tazas de café (o tres latas de gaseosa) por día basta para volver tan dependiente a una persona que suspender el hábito puede generar síntomas de abstinencia, dijo Murray Carpenter, autor de “Caffeinated” en Men’s Journal.

En cantidades pequeñas, la cafeína nos hace sentir bien, pero “es una droga cuya fuerza se subestima constantemente”, dice Carpenter.

“Un cuarto de una cucharada de té genera una sensación desagradable en el organismo -aceleración cardíaca, sudor y ansiedad aguda. Una cucharada entera mata”, escribió en “Caffeinated”.

Eso es más que el nivel máximo seguro que establece la mayoría de los funcionarios de salud: 400 miligramos diarios, aproximadamente el contenido de 4 tazas de café torrado, 10 latas de gaseosa o dos bebidas energizantes, dice la Clínica Mayo.

A través de sus amigos, los investigadores descubrieron que Cripes consumió una Diet Mountain Dew grande, un Café Latte de McDonald’s y 16 onzas de un tipo no especificado de bebida energizante en el lapso de dos horas.

Dado que no se han revelado los detalles específicos, no es posible calcular cuánta cafeína ingirió el adolescente antes de desplomarse en su clase de arte. Pero según el Center for Science in the Public Interest, una Mountain Dew de 20 onzas contiene 91 miligramos de cafeína; y las bebidas energizantes, una cantidad que va de 50 a 357 miligramos, dependiendo del tamaño y de la marca.

El sitio web de McDonald’s, dice: “Actualmente no informamos la cantidad de cafeína en nuestro café -pero podemos prometerte una taza brillante y equilibrada”.

Las familias y las bebidas energizantes
A nivel nacional, las ventas de gaseosa, la fuente más típica de cafeína para los niños, están bajando, mientras que las ventas de bebidas energizantes crecen. 

El martes, al día siguiente de conocerse los resultados de la autopsia de Cripe, una firma estadounidense de investigación de mercado publicó un informe según el cual las ventas de bebidas deportivas y energizantes superaron los US$25.000 millones en 2016, y que dichas ventas son especialmente fuertes en hogares con niños pequeños.

“Tener un solo niño en la casa es suficiente para ver este salto en el consumo registrado, y el consumo de bebidas energizantes tiende a aumentar con cada hijo adicional”, dijo la compañía de marketing, Packaged Facts, en cuanto al informe. “Estas conclusiones sugieren que muchos recurren inicialmente a las bebidas energizantes como una herramienta para estar a la altura de las exigencias del cuidado para los niños pequeños”.

A los padres preocupados por la ingestión de cafeína de sus hijos les convendría repensar esa práctica. Algunos estudios han constatado que los niños imitan el comportamiento de los padres en materia de alimentación y bebida, y tener bebidas energizantes en la casa puede traer aparejado un consumo accidental.

La Academia de Pediatría de los Estados Unidos dice que los niños y los adolescentes no deberían tomar bebidas energizantes y deportivas sino directamente beber agua.

De los más de 5.000 casos que fueron denunciados a los centros de control de intoxicaciones entre 2010 y 2013 en los que estuvieron implicadas bebidas energizantes, casi la mitad de los niños no sabían qué estaban bebiendo. En muchos casos, los niños de hasta 6 años consumieron la bebida que encontraron en la nevera, o que uno de los padres u otro hermano habían dejado a la vista.

Las bebidas se consideran suplementos nutricionales y por ende no están reguladas por la Food and Drug Administration. Pero la FDA invita a los consumidores a presentar informes sobre reacciones adversas, y los investiga y en algunos casos emprende acciones contra los fabricantes. El organismo llega más de un año revisando los niveles seguros de cafeína y analizando si se debe exigir a los fabricantes revelar qué cantidad contienen sus productos.

“Las normas existentes nunca anticiparon la actual proliferación de productos con cafeína”, dijo el ex funcionario de la FDA, Michael Tayler, quien se retiró de la agencia el año pasado.