A mediados de esta semana, tal y como se había anticipado, la Academia Mexicana de Artes y Ciencias Cinematográficas dio a conocer a la representante de nuestro país para los premios Oscar y Goya.
 
Ese honor corresponde este año por partida doble al excelente largometraje documental “Tempestad”, de Tatiana Huezo, ganador, entre otros, al Ariel a la Mejor Dirección del 2016 que en estos espacios recomendamos justo en vísperas de dicha premiación a lo mejor de cine mexicano en el último año porque luego de su exhibición en la ciudad como parte de una de las últimas Muestras Internacionales de Cine pudo verse hasta de manera gratuita a través de la plataforma de Film in Latino.
 
En días recientes, por si no ha tenido oportunidad de ver este gran trabajo fílmico, ha sido la plataforma Cinépolis Klic la que ha puesto a la renta “Tempestad”, al tiempo que Netflix tiene cuando menos un par de meses de tener disponible otro destacado trabajo cinematográfico, en su caso en el género de la ficción, que por su parte fue ganador en la pasada edición de los premios Goya a la Mejor Película; al Mejor Director Novel; al Mejor Guión Original y al Mejor Actor de Reparto y el Mejor Guión al tiempo que para los premios Ariel estuvo nominada en la terna a la Mejor Película Iberoamericana … la misma en la que en correspondencia estará compitiendo “Tempestad” para su respectivo Goya en la premiación del próximo año.

“Tarde para la ira” inicia con un el intento de huida de un grupo de ladrones de una joyería que es frustrado y por tanto los ejecutores del atraco son capturados. El tiempo pasa, y conocemos a Ana (Ruth Díaz), una madre soltera quien en medio de la espera de que salga su esposo de la cárcel puesto que era el chofer del automóvil que recogió a la banda del mencionado robo conoce a José (Antonio de la Torre), un hombre introvertido y ajeno en apariencia al ambiente que la rodea con quien inicia una relación.
 
Lo que Ana desconoce es que el encuentro con José no ha sido tan fortuito como parecía, ya que precisamente sus vidas se relacionan directamente al robo de la joyería con el que inicia la historia y que desencadena la muerte de dos personajes que detonan una historia de venganza que como su título lo indica por la tardanza cronológica que involucra podría hacer pagar a justos por pecadores.
 
Ópera prima del cineasta español Raúl Arévalo, “Tarde para la ira” es un muy bien tejido thriller dramático basado ante todo en un guión redondo que a la manera de otra recomendación de película española nominada a Goyas y Premios Platino como “El hombre de las mil caras”, de Alberto Rodríguez, que recomendamos hace un par de meses y también sigue disponible en Netflix, son ejemplos de ficciones bien construidas a partir de una historia que ofrece desde realismo hasta sorpresa que es lo que a final de cuentas atrapa a un espectador que mínimamente busca un cine de calidad. “Tarde para la ira” no sólo cumple de forma cabal con ello sino que consolida la tradición de buenas obras cinematográficas generadas en la también llamada Madre Patria.
 
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