Mirador 18/11/17

Usted está aquí

Mirador 18/11/17

Ella caminaba con gracioso andar. Su paso menudito hacía que latiera más aprisa el corazón de quien la amaba.

Él caminaba con airoso garbo. Su paso firme y gallardo hacía que su enamorada se sintiera protegida.

Pasaron los años. ¡Cómo pasan! Ahora ella y él caminan con dificultad. Los veo ir lentamente por un andador del parque. Se apoyan uno en el otro para no caer. Parece que cuentan cada paso, y miran cuidadosamente dónde pondrán el pie.

Pero van juntos, igual que han ido desde el día en que él le dijo que la amaba y ella respondió: “Yo también te quiero”.

Para él ella sigue siendo la muchacha de paso gracioso y menudito. Para ella él es aún el hombre de gallardo y firme andar.

Así, ancianos en la vida y en el recuerdo jóvenes, seguirán juntos hasta que uno de los dos falte. Y juntos caminarán siempre y para siempre por un camino que no tiene final: el del amor.

¡Hasta mañana!...