El incendio en un reformatorio de la ciudad peruana de Trujillo dejó cinco muertos y 19 heridos y fue originado por una pelea entre bandas rivales del recinto, confirmaron hoy autoridades judiciales.

"En el Perú tenemos una delincuencia de tercera y cuarta generación, niños que provienen de hogares disfuncionales y que viven del delito. Cada vez crece este efecto social y se refleja en los establecimientos (reformatorios)", dijo el gerente de centros juveniles del Poder Judicial, Julio Magán, en la radio RPP.

Según explicaron autoridades penitenciarias, los miembros de dos bandas del reformatorio provocaron el incendio tras prender fuego a varios colchones, en la puerta de ingreso de un pabellón.

Los bomberos lograron rescatar a 32 jóvenes, de los cuales cinco murieron por asfixia. Los heridos fueron trasladados a centros médicos.

Magán, ex jefe del Instituto Nacional Penitenciaro, advirtió que el centro de rehabilitación tiene problemas de hacinamiento, pues no solo recibe a adolescentes, sino además a mayores de edad.

"No solo ingresan personas que hacen arrebatos o hurtos simples, sino entran chicos por actitudes más violentas y por otros tipos de delitos como extorsión, crimen organiado o sicariato", dijo Magán.

El funcionario detalló que los otros ocho reformatorios que existen en el Perú tienen los mismos problemas y que no hay presupuesto para mejorar la infraestructura.