El presidente de Burundi, Pierre Nkurunziza, también es el centro delantero de su equipo el Haleluya FC y en un partido celebrado ante el Cyriaque Nkezabahizi mandó a la cárcel  al entrenador rival por "conspiración contra el presidente". 

Pierre Nkurunziza organizó ui partido el fin de semana y como no pudo brillar tras ser marcado fuertemente y recibir varias faltas no tuvo otra medida que encarcelar al entrenador. 

“Descontento por el juego brusco hacia su persona y su carencia goleadora, Nkurunziza decidió arrestar al entrenador y al ayudante del equipo contrario, culpándolos de no haber instruido adecuadamente a sus jugadores y acusándolos de 'conspiración contra el Presidente de la República", publicó el diario Clarín.

Otros medios citan que los refugiados congoleños que marcaron al presidente no lo conocían, mientras que los originarios de Burundi fueron más cautelosos. 

La prensa gubernamental indicó que las detenciones fueron parte de un proceso para "socavar la seguridad del estado". 

El presidente llegó al poder desde el 2005 tras la guerra en Burundi y lleva tres mandatos consecutivos en el cargo. 

Su amor al deporte viene desde pequeño donde fue profesor en la Universidad Nacional, además de ser amante de la natación y el ciclismo. 

Desde su última reelección, casi medio millón de refugiados han abandonado el país huyendo del conflicto, además de los abusos en los derechos humanos y el deterioro de la situación humanitaria en Burundi.