Monterrey, Nuevo León.- El amor de un padre de familia y el profesionalismo de médicos del Hospital 25, Unidad Médica de Alta Especialidad del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) permitieron salvar la vida de un menor mediante el trasplante de hígado de un donador vivo.

Por primera ocasión se realizó un trasplante de este tipo en la entidad con éxito.

El pequeño que salvó su vida se llama Joshua y tiene apenas 7 años de edad y su progenitor, quien se convirtió en el donador que le salvó su vida, es Francisco Javier Résendiz, de 26 años.

En rueda de prensa, Guillermo Alberto Alvarez Treviño, jefe de División de Trasplantes de  la UMAE 25 habló del éxito del trasplante  y dijo que el hombre, de oficio soldador, donó “un pedacito”  de su hígado a su vástago para salvarle la existencia.

De nacimiento, el pequeño presentó el Síndrome de Allagyle que es un trastorno de los conductos biliares, lo que le ocasionó una cirrosis a muy temprana edad.

“Debido a su deterioro hepático y su mal pronóstico de vida, de no más de tres años, los médicos deciden estudiarlo para el trasplante de hígado. Los padres de Joshua al estar conscientes de la gravedad del caso y sabiendo que el tiempo de espera para obtener un hígado  puede alcanzar hasta un año, deciden ingresar al Programa de Trasplante Hepático de Donador Vivo” explicó.

El médico dijo que tras los estudios de compatibilidad  se realizó la delicada operación y al padre se le extrajo un segmento del lado izquierdo , que representó un 30 por ciento del órgano.

La extracción del hígado y el respectivo implante se realizaron en salas contiguas y la del menor duró unas 11 horas.

En las intervenciones participaron por lo menos una docena de médicos.