El Comité Ejecutivo de la UEFA eligió el estadio Ataturk de Estambul como sede de la final de la Champions League de la temporada 2019-2020 y que el Arena Gdansk polaco acoja la de la Europa League.

Entre otras decisiones, el Ejecutivo también acordó que la Supercopa de esa misma temporada 2019-2020 se dispute en el estadio Do Dragao del Porto y que la final de la Champions femenina se resuelva en el austríaco Arena de Viena, según confirmó la UEFA.

El Ataturk turco competía por la Final de la Champions con el estadio de la Luz de Lisboa, pero el Ejecutivo se decantó por el primero para relevar al madrileño Wanda Metropolitano como escenario de la máxima competición continental de clubes, donde se resolverá el título el 1 de junio de 2019.

Otro estadio portugués, en este caso Do Dragao de Oporto, optaba a albergar la otra final europea, la de la Europa, pero el Comité Ejecutivo se decantó por el polaco Arena Gdansk, que sucederá al olímpico de Bakú donde se disputará la del año que viene, el 29 de mayo.

El campo del Porto sí recibió el visto bueno de la UEFA para convertirse en escenario de la Supercopa 2019-2020, competición que se este año se jugará el 18 de agosto en Tallin y que enfrentará al Atlético de Madrid, ganador de la Liga Europa, con Real Madrid o Liverpool, finalistas de la Champions.

El Ejecutivo de la UEFA, que celebró su última reunión de la temporada en la capital ucraniana, resolvió además que la final de la Liga de Campeones femenina de dentro de dos años se celebre en el Arena de Viena, a la que también optaban Moscú y Lieja (Bélgica).

En septiembre del año pasado el campo elegido para la final de esta competición en 2019 fue el estadio Ferencvaros Arena de Budapest.