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Detienen sus labores en empresas socias de Coparmex Coahuila Sureste por juego del TRI
Más de un 70 a 80% de las empresas socias de Coparmex Coahuila Sureste detuvieron sus operaciones ayer por la mañana para que los trabajadores vieran el partido México-Suecia; en algunas hubo refrigerio para el personal, en otras balones de fútbol y playeras alusivas a través de dinámicas y rifas.
El presidente de Coparmex Coahuila Sureste, Ricardo Sandoval Garza, informó que todas las empresas se organizaron muy bien y se prepararon para ver el partido. De los 350 socios de este centro patronal, estimó que hasta un 80% detuvo operaciones en ese horario, sólo dejaron guardias en los procesos que deben ser continuos.
De la recuperación de este tiempo, se comentó que puede ser vía productividad porque el colaborador al sentirse tomados en cuenta recuperan el tiempo los siguientes meses, y la misma estrategia se implementará en el siguiente juego.
Entre las plantas que detuvieron operaciones estuvieron ZF Powertrain Modules, el director de Relaciones Laborales dijo que desde inicios de año tenían programada la suspensión de la operación por esos juegos del Mundial, por ello, no se afecta la operación. En el primer turno laboran 450 trabajadores y se les dio un refrigerio (burritos y agua).
En el caso de Tupy, en Saltillo fueron mil 550 trabajadores los que atendieron la transmisión, mientras que en la planta de Ramos Arizpe fueron 800 personas.
Asimismo, la planta de Stabilus en Ramos Arizpe fue otra que detuvo sus operaciones por el juego, instalaron pantallas y dieron un pequeño refrigerio, en este caso, el tiempo del juego se recuperó anticipadamente con horas extras.
Otras empresas que se sumaron a la transmisión fueron las del GIS y ‘Zapa’, entre ellas también Saint Gobain, Amissa, Nutec, Askoll, Voss, Hyster, BIC, Nemak, Ise Metal, además del refrigerio que dieron a los trabajadores (tacos, hamburgesas, burritos, botana), algunas hicieron rifas de playeras o balones; en el caso de la planta de GST fue en el comedor donde los trabajadores que acudían podían ver el juego.
Finalmente, en los restaurantes, nada más por citar un ejemplo, el de Los Compadres en el bulevar Colosio lucía lleno durante la transmisión del juego y lo mismo pasaba con sus otras sucursales.