Dos adolescentes que disfrutaba del primer día vacacional en casa de su abuela, se les hizo fácil encender un petardo “ferrocarrilero” y les estalló en el rostro que ahora los mantiene hospitalizados en la clínica uno del IMSS.

Son quemaduras de segundo grado las quien presentan los hermanos Violeta y José Rangel de 13 y 17, a ella le afectó la región facial y el ojo izquierdo.

Mientras que a José trae esquirlas en región frontal.

El accidente ocurrió en el ejido La Hedionda, donde vive su abuela. Nunca habían detonando estos artefactos, por lo que no midieron el peligro y usaron un encendedor, por lo que la explosión ocurrió frente a sus rostros.

El incidente causó alarma en el poblado, pues se ubican a 80 kilómetros de Saltillo sobre la carretera a Zacatecas.

Los menores fueron subidos a una camioneta para llevarlos a un hospital, pero a las afueras de la comunidad fueron interceptados por una ambulancia de bomberos. Su estado de salud fue reportado como delicado.

Más tarde llegaron al hospital elementos de la policía investigadora y un elemento de la Secretaría de la Defensa Nacional, (Sedena) para conocer la procedencia del artefacto explosivo.Los padres serán citados en la Procuraduría de los Niños, Niñas y la Familia (Pronnif).