Con vibrantes colores Alejandra Murillo es capaz de inmortalizar a tus más queridas mascotas en una pintura que, además, podrá decorar tu casa sin problemas. No importa si se trata de un perro, un gato, un ave o cualquier otro animal de compañía, esta pintora captará su esencia en el cuadro.

De formación arquitecto y radicada en Puerto Vallarta tiene ya cerca de tres años trabajando este tipo de pintura en particular que bautizó como “Art-nimales”, aunque previamente ya tenía interés por este arte a pesar de que no le dedicaba el tiempo completo.

“Antes pintaba otras cosas, pero animales justo tengo tres años”, explicó en entrevista para VANGUARDIA, “yo todo el tiempo he pintado animales y una vez una chica me pidió que le pintara a su perro. Siempre los he pintado de colores, pero cuando pinté al perro me gustó mucho la idea de pintar mascotas y no pensé que fuera a pegar tanto, no pensé que en México la gente quisiera tanto a sus mascotas”.

“La verdad me di cuenta que mucha gente quiere a sus animales, a sus mascotas y fue como un experimento. De pintar animales me fui a pintar mascotas y pegó muchísimo pero toda la vida tuve este estilo así colorido”, agregó.

Utilizando una paleta de vibrantes colores Alejandra reproduce las imágenes que les mandan de mascotas de todo México e incluso fuera del país en obras cuyos tamaños van desde pequeños lienzos no mayores de 50 cm por lado hasta piezas de cerca de 2 metros de altura.

La pintora nos contó que a pesar de sus estudios y de haber trabajado en el ayuntamiento en esa área durante un tiempo al final terminó estudiando pintura con una maestra de allá, a quien ayudaba también en su estudio.

“La verdad a mí lo que siempre me interesó desde niña fue pintar y entonces cuando tuve a mi bebé ya no tuve tiempo para estar en un despacho, porque absorbe mucho tiempo y conseguí trabajo con una pintora, ella se fue a su lugar donde vivía y yo me quedé pintando con mi estilo, porque con ella pintaba con el estilo que me ponía y decidí dejar la arquitectura y dedicarme a la pintura”, comentó.

Los pedidos, que envía a todo el país, Estados Unidos y otros países como Suiza y Argentina, son principalmente de perros y en especial de mascotas fallecidas, cuyos rostros sus dueños quieren recuperar a través del trabajo de Murillo.

Comentó que en este tipo de casos suelen pedirle que “les ponga un aro como ángeles, una aureola. Pinto muchos perros fallecidos, no sé si piden 10 cuadros 7 ya fallecieron y entonces ellos son los que suelen pedirme cosas especiales, algún letrerito de ‘gracias por todo’, a veces son ellos con su perrito abrazándolo o cosas así”.

Aunado a esto también ha pintado gatos, loros, hurones “pero los más populares siempre son los perros, en segundo lugar los gatos y bueno, van dos personas que me mandan pintar hurones junto a sus perritos, porque tienen los dos, y otro que fue para una veterinaria que tiene un hurón de mascota”.

Expresó que la mayoría de las personas, cuando ven el resultado de las obras de Alejandra, lloran conmovidos por la imagen. “Muchos perros ya no están con ellos y me imagino que obviamente al verlos de nuevo es mucha la emoción”, explicó.

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