Una camioneta llegó a toda velocidad al Hospital Universitario, el rechinido de las llantas se escuchaba desde lejos. Un hombre con una herida de bala, un joven eufórico pidiendo atención para su acompañante eran los que viajaban adentro.

1:50 de la mañana, aproximadamente, Rafael Gerardo Santana de 37 años y su sobrino, Cristian Ulises de 20 iban en una camioneta por la calle de Pedro Ampudia, cuando fueron interceptados por un vehículo.

Bajaron tres hombres, uno de ellos con arma en mano, les querían quitar el vehículo, pero sin mas se escuchó una detonación, un estruendo que hizo que los maleantes se fueran.

El balazo pegó en el brazo izquierdo de Rafael. Ambos estaban en una fiesta, en la colonia Bellavista, pero antes de las 2 de la mañana Rafael dijo que ya se iba, y se llevó a su sobrino, que vive a escasos metros de donde ocurrió la agresión. Le quedaba de paso para llegar a su domicilio en la colonia del Valle.

Pero ninguno llegó a su casa, llegaron al nosocomio a pedir ayuda quedándose ahí durante el resto de la noche. Dando explicaciones de lo ocurrido a elementos de la Fiscalía General del Estado, quienes llegaron al recibir el reporte de una persona herida por arma de fuego.

Al tomar conocimiento los agentes investigadores comenzaron con las diligencias para dar con el paradero de los responsables, de los que poco o nada se sabe, ya que le vehículo era oscuro, no se distinguía con lo osucro de la noche y de las placas nada se sabe, por lo que las investigaciones tardarán en dar resultados.