Rafael Zamorano / ESPN

Los Ravens arrasaron con la temporada regular del 2020, comenzando por su división. Los Steelers perdieron a su quarterback titular, y los suplents no pudieron dar batalla, mientras que los Browns se colapsaron bajo el peso de sus propias expectativas. Mientras tanto, los Bengals se encaminaron a la primera selección global del draft.

Baltimore parte como gran favorito para repetir en este sector, pero se espera que con un Ben Roethlisberger recuperado y un Baker Mayfield liberado de la presión del año pasado, Pittsburgh y Cleveland ofrezcan mayor resistencia. ¿Y qué hay con Cincy? Bueno, Joe Burrow necesitará mucha de esa magia que le llevó hasta el Heisman con LSU el año pasado para evitar que su equipo se rezague.

¿Cuánta presión carga Baker Mayfield como QB de la ofensiva de Cleveland?

Bastante. El fracaso que supuso la temporada del 2019 después de un muy alentador 2018 significa que el lastre ha crecido para Mayfield, mientras intenta convencer al equipo que es la respuesta a largo plazo.

Mayfield tuvo episodios realmente brillantes en el 2018, destacando particularmente su récord de 27 pases de anotación para una campaña de novato, en camino a un registro de 7-8-1. Los Browns ganaron 5 de sus últimos 7 compromisos, preparando la mesa que las expectativas del siguiente año se dispararan. Llegaron también las adiciones de Kareem Hunt y Odell Beckham Jr., y muchos se apresuraron a colocar a Cleveland entre las mejores ofensivas la NFL.

Con todo y eso, la mayor parte del peso descansa sobre los hombros de Mayfield; esa es la naturaleza de la posición en la que juega. Una de las mayores virtudes de Mayfield como novato, fue su capacidad para hacer que sucedieran cosas, cuando la jugada parecía estar condenada de inicio.

¿Puede Lamar Jackson conquistar un Super Bowl tras ser el JMV?

Quien ponga en duda la calidad de Jackson como quarterback, no ha estado poniendo atención. Nunca en la historia de la NFL, un pasador había lanzado para más de 3 mil yardas y corrido para más de mil en el mismo año. Jackson tiró para 3 mil 127 yardas y corrió para mil 206 yardas más. Encima de todo, lideró a la NFL en pases de touchdown con 36, y en porcentaje de pases de anotación, con el 9 por ciento de sus envíos terminando en anotación. A eso, hay que sumarle 7 touchdowns terrestres y un promedio de 6.9 yardas por acarreo.

Puede gustar o no el estilo de Jackson, pero dudar de la calidad del pasador de los Ravens no debe estar a discusión, No en vano, se convirtió en apenas el segundo jugador en la historia de la liga en obtener el nombramiento de Jugador Más Valioso de manera unánime, después de que Tom Brady lo consiguiera en el 2007. Piensen en eso un momento. Ni las grandes temporadas de Jugador Más Valioso de Dan Marino de 1984, de Peyton Manning en el 2013, o el propio Mahomes en el 2018, lograron el 100 por ciento de los votos disponibles.

El siguiente paso es claro: trasladar todo ese talento en un título de la NFL.

¿Qué debemos esperar de Joe Burrow en su temporada de novato?

Honestamente, no lo sabemos a ciencia cierta. Sí, Burrow viene de una de las campañas más brillantes en la historia del juego universitario, completando el 76.3 por ciento de sus pases y tirando para 5 mil 671 yardas con 60 touchdowns en camino a una temporada invicta, el campeonato nacional, y un trofeo Heisman.

Pero, para todo lo espectacular que Burrow en el 2019 con LSU, no podemos más que preguntarnos si se trata solamente de un “one-hit wonder”. Después de todo, en el 2018, al frente de los mismos Tigers, completó apenas el 57.8 por ciento de sus pases, para 2 mil 894 yardas y 16 touchdowns, cuando proyectaba como proyecto de sexta o séptima ronda de draft. Antes de eso, Burrow perdió la carrera por el puesto titular en Ohio State ante Dwayne Haskins, ahora pasador de Washington.

¿Cómo explicar el salto tan grande en la producción de Burrow, de un año a otro?

Mucho crédito debe ser para el coordinador de juego aéreo de Burrow en LSU, Joe Brady, quien ahora desempeñará el puesto de coordinador ofensivo con los Panthers. Antes de eso, Brady fue asistente ofensivo de los Saints, bajo Sean Payton.

El actual coordinador ofensivo de los Bengals, Brian Callahan, deberá estudiar a detalle lo que hizo muy bien Burrow durante su temporada récord del 2019, aunque también lo mal que le fue en 2018.

¿Qué debemos esperar de Ben Roethlisberger en su regreso de lesión?

No sé si se habla suficiente de este tema fuera de Pittsburgh. Quizás, se está dando por sentado que Roethlisberger volverá como si nada de la cirugía en el codo que le arrebató prácticamente la totalidad de su temporada pasada. Aquí es donde debe haber cautela en Pittsburgh.

De acuerdo al propio Roethlisberger, no está al tanto de ningún quarterback que haya regresado de este tipo de intervención, en la que tres tendones se desprendieron del hueso y debieron volver a ser sujetados.

“Por lo que me han dicho, nunca ha sucedido a un quarterback de esta magnitud”, dijo el pasador de Pittsburgh, aproximadamente hace un mes. “Creo que hubo un quarterback al menos que sufrió uno [tendón desprendido], quizás dos, pero por lo que entiendo, no tres”.

Asumiendo que los tendones en el codo de lanzar a Roethlisberger no le causan problemas físicos para lanzar —y los reporteros desde el campamento de los Steelers han sido positivos en este sentido— también vale la pena cuestionar en qué nivel regresará el quarterback de 38 años de edad después de prácticamente un año sin jugar, cirugía o no. Seguro, la última temporada que jugó completa Roethlisberger fue de 5 mil 129 yardas por aire para liderar a la NFL.

DATOS

2012 año en que la AFC Norte ganó su último Super Bowl, fueron los Ravens en la Edición XLVII.

6 títulos de la NFL tienen a los Steelers como los máximos ganadores de su división.