3 pautas para criar hijos como pareja

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3 pautas para criar hijos como pareja

Foto: Tomada de Internet
Las maneras de corregir y orientar, las ideas y la aplicación de normas y reglas tendrán que ser el resultado de la complementación de las experiencias de dos padres diferentes, criados de zaneras diferentes

Un buen consejo para toda pareja de novios formales es que antes del matrimonio, mucho antes de que lleguen los hijos, dialoguen y se pongan de acuerdo en cuanto a cómo van a educar sus hijos, cuáles serán las reglas a implementar y los criterios a seguir en ciertas circunstancias. No perdamos de vista que la manera en que cada uno fue educado y criado fue la ideal, pues gracias a ella se es la persona que se es, pero cuando hay que aplicarla en casa y con los hijos, a la pareja puede que no le parezcan algunas las cosas.

Las maneras de corregir y orientar, las ideas y la aplicación de normas y reglas tendrán que ser el resultado de la complementación de ambas experiencias, sin olvidar que cuando se platique de ello en pareja se tendrá que ser conciliador, objetivo y capaz de escuchar y aceptar el punto de vista del otro. Se debe respetar ante todo la opinión de cada uno y asimilar cuando se tenga que adaptar a un modo que no sea el propio.

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La forma de educar a los hijos será decisión de dos

Muchas veces te enfrentarás a las críticas y comentarios de los abuelos, parientes y otras personas no involucradas directamente en la crianza: que si eres muy exigente, muy intransigente, regañón, complaciente, permisivo, etc.

Para no ser flanco fácil de estos comentarios hay que tener bien definidas las medidas a seguir para cubrir todos los aspectos de la educación de los menores. Tener una línea establecida con su holgura te permitirá ser estricto y exigente, así como permisible y condescendiente según sea el caso. Esto te ayudará a evitar caer en imposiciones de terceras personas y de la pareja con intransigencia y autoritarismo.

De antemano, la prioridad será el bienestar, la seguridad y la motivación que le brindes a tu pequeño. Recuerda que una educación basada en el respeto, valores y amor hacia los hijos te dará las bases para que tus reglas y límites no fluctúen dependiendo la situación, el lugar o el momento. Hay que estar convencidos de que la manera en que se ha decidido educar a los menores es la mejor y ni tú ni tu pareja pueden ir por el mundo cambiando de idea por los comentarios que se reciban de terceros.

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Aprender a escuchar y olvidar imposiciones

Si tú o tu pareja crecieron en la época del “porque lo digo yo” y de “con golpes la letra entra”, ojo, ya no lo debes aplicar o dejar que tu pareja lo haga. Ahora el respeto y la admiración de los hijos se gana siendo justo y centrado, comprensivo y tolerante, dejando que expresen su querer y su sentir; ya desde pequeños desarrollan rasgos característicos de su personalidad lo que les permiten tener bien definidas ciertas actitudes y reacciones. Así que aprende a observar, escuchar y respetar su modo de ser y de igual forma, ayuda a que tu pareja también aprenda a observar, escuchar y respetar tu modo ser y el de tus hijos.

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Para hablar, regañar y conciliar, hazlo siempre en privado

Hay padres que en el momento en que perciben una mala acción o actitud, regañan, sin importar el momento y el lugar, de una manera incluso agresiva, poniendo en evidencia al niño frente a todos los presentes. Por supuesto, esto no es aconsejable. Genera grandes conflictos, inseguridades y resentimientos del hijo y de la pareja hacia quien actúa así. El consejo es siempre llevar al niño hacia un lugar apartado donde se pueda hablar con él.

La conciliación será la base para llevar a cabo las medidas correctivas y constructivas en el actuar de tus niños; en pareja debes estipular cómo se conducirán para criar de la mejor manera a sus pequeños.