Desde el domingo, Rusia es un rehén de alarmas de bombas falsas; desde Ekaterinburgo a través de Moscú.

Más de 65 mil personas han sido evacuadas en docenas de ciudades de la Federación rusa, de los cuales cerca de 20 mil, en Moscú. Hasta ahora, en los sitios inspeccionados, no se encontró ninguna bomba.

Las evacuaciones comenzaron el domingo en Omsk y Riazán. Inicialmente se pensó que incluso eran ejercicios. Luego, el Lunes hubo 42 amenazas de bomba falsas en varias ciudades involucradas. Ayer llegaron amenazas anónimas en 22 ciudades, incluyendo Perm, Novosibirsk y Ekaterimburgo, lo que llevó a evacuar a cerca de 45 mil personas de 205 edificios.

Finalmente hoy, cerca de 20 mil personas fueron evacuadas sólo en la capital, de más de treinta sitios, centros comerciales y una docena de los grandes almacenes Gum, tres universidades, dos hoteles y dos estaciones de ferrocarril.

Las alarmas han sido también en Kaliningrado en el Báltico y en Kamchatka en el Lejano Oriente de Rusia.

Los servicios secretos del FSB están tratando de identificar a los responsables de las alarmas. En la región de Saratov, donde fueron evacuados del ayuntamiento y la Universidad, las amenazas se produjeron en medio de llamadas telefónicas anónimas a través de Internet.

Eso hace que sea difícil determinar su origen. Algunas fuentes han dicho que podría ser en Ucrania. “Nunca sucedió algo similar antes, es cien por ciento de teléfono organizada terrorismo”, dijo Frants Klintsevich, Ministro Consejero de la comisión de Defensa de la cámara alta del parlamento.

“El único objetivo es sembrar el pánico. Sin embargo, es posible que este es el trabajo de preparación para un ataque terrorista".

Con información de Repubblica