Del otro lado, aunque los azulcremas siguen sin ser el explosivo equipo que haga justicia a sus elementos más ofensivos, definitivamente ha encontrado un balance en su linea medular: Bruno Valdez, Edson Álvarez, Guido Rodríguez, Renato Ibarra y Nicolás Castillo se han convertido en los cinco elementos más importantes en el parado de Miguel "Piojo" Herrera.

Por fin, después de una serie de desafortunados juegos, Nico terminó siendo el "crack" que hizo válido el costoso fichaje por el cual pagaron los de Coapa. No habían pasado ni tres minutos cuando el delantero chileno, recién convocado con su Selección Nacional hizo de cabeza un golazo que heló todo el Estadio Akron.

Después, vinieron las desgracias tapatías.

Alexis Vega, convocado con Gerardo Martino al Tri, fue retirado al minuto 30 por Luis Madrigal tras la decisión de su entrenador, José Cardozo, quien no quiso arriesgar la expulsión del jugador luego de cometer varias faltas y de ya contar con tarjeta amarilla.

De ahí, Chivas se quedó con 10 elementos pues al minuto 37 Jesús Molina metió un pisotón a Rodríguez, otro convocado por Lionel Scaloni para Argentina, y el silbante decidió mostrarle la tarjeta roja.

Y, por si fuera poco, Cardozo estuvo obligado a quemar un segundo cambio por una lesión de Alan Pulido, para darle entrada a Miguel Basulto.

El público sólo veía como su equipo se desmoronaba y caía a pedazos, una vez más, pues a media semana las mismas Chivas fueron eliminadas por su acérrimo rival en la Copa MX, el primero de estos dos Clásicos Nacionales.

Los aficionados no se callaron nada ante Cardozo, y al medio tiempo, pidieron la salida del exgoleador de Toluca, algo que se ha manejado en redes sociales y que ni José Luis Higuera ni Amaury Vergara han dado su declaración al respecto.

Pero los malos resultados del "Príncipe Guaraní" respalda la postura de la fanaticada rojiblanca.

Guadalajara y América regresaron al campo, pero se notó quien tenía hambre por seguir avanzando rumbo a la Liguilla del Clausura 2019 y quien no tiene ni pies ni cabeza, ni estrategia y mucho menos corazón.

Esto se reflejó en el marcador. Andrés Ibargüen, quien no había tenido un buen inicio de campeonato, desbordó para meterse al centro del área chica y sacó un potente disparo que dobló el guante de Raúl Gudiño para lapidar un encuentro que nunca tuvo un "aire" de esperanza para los locales.

Al final, el "Piojo" descuidó un poco el parado de los  suyos, pues el Rebaño tuvo un par de tiros al marco de Marchesín por parte de Isaac Brizuela, Madrigal y Ronaldo Cisneros que se quedaron en eso, puros intentos.

El Akron fue testigo, por enésima vez, de una pobre y triste exhibición del equipo de su corazón, quienes no han dado ni una sola alegría a los suyos desde el título de la Concachampions en 2018 y que permitió, de la peor forma, que el más ganador de México se fuera a casa con dos justas victorias y un momentáneo cuarto lugar en la Tabla General.