Barcelona se desangra en España

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Barcelona se desangra en España

Ni los descansos en Champions sirvieron para que Messi pudiera ser el héroe que tanto necesita Barcelona. AP
La única grieta que encontró el Barcelona llegó al poco de comenzar al segundo tiempo, en una acción desafortunada de Pedro Alcalá

CÁDIZ.- El Barcelona continuó con su sangría lejos del Camp Nou, cayó por 2-1 ante el Cádiz, que logró su primera victoria en el Ramón de Carranza, lo que deja al cuadro de Ronald Koeman a doce puntos del Atlético de Madrid y por lo tanto con su proyecto de luchar por el título casi imposible.

El conjunto azulgrana, tras sus últimos buenos resultados principalmente en la Champions, dio un paso atrás casi decisivo aunque queda mucho campeonato, incapaz descabalgar a un oponente que se defendió perfectamente, como ya hiciera en el Alfredo di Stefano ante el Real Madrid, y que reeditó el calificativo de “matagigante” que disfrutó en los años ochenta.

Los hombres de Ronald Koeman siempre fueron por detrás en el marcador y cuando lograron empatar y parecía que estaban en disposición de llevarse el partido se toparon con un error que aprovechó todo un veterano goleador como Álvaro Negredo para darles el tiro de gracia.

Este Cádiz de Álvaro Cervera tiene las ideas muy claras. Sabe cuáles son sus virtudes. Sacó el máximo rendimiento a su efectividad en ataque y a su perfecta labor defensiva con la que bloqueó todos los caminos que trató de encontrar el Barcelona para llegar ante el meta argentino “Conan” Ledesma.

No le pudo salir mejor el planteamiento. En su primera jugada de ataque se adelantó en el marcador. Álex Fernández botó un saque de esquina, peinó Rafael Giménez “Fali” y, tras un error de Óscar Mingueza y tocarla André Ter Stegen, remachó a la red Álvaro Giménez (9’).

Philippe Coutinho, Martinn Braithwaite, Leo Messi rozaron el empate, pero entre la falta de precisión y Ledesma nada varió y el Cádiz se fortaleció en el campo en las labores defensivas como un muro infranqueable.

La única grieta que encontró el Barcelona llegó al poco de comenzar al segundo tiempo, en una acción desafortunada de Pedro Alcalá, cuyo intento de taponar un centro acabó en su propia portería.

El partido parecía que definitivamente cambiaría de rumbo. Un espejismo, porque casi de inmediato un error de Clement Lenglet y Marc Andre Ter Stegen lo aprovechó Álvaro Negredo para, en una acción casi de fe, ir a la presión, hacerse con el balón y marcar a puerta vacía.

Una victoria histórica que consolida el proyecto de un recién ascendido convertido en la gran revelación de este inicio de campeonato que no para de dar grandes sorpresas