Conoce a Betty, la secretaria de la redacción de Vanguardia

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Conoce a Betty, la secretaria de la redacción de Vanguardia

Fotos: Omar Saucedo
En VANGUARDIA damos gracias a cada una de las personas que han hecho del secretariado un oficio de respeto, con vocación de servicio y cordialidad para resolver los problemas que surgen en las oficinas; por fortuna esta redacción cuenta con la suya

¿Qué sería esta redacción sin Beatriz Ramírez? Mujer con vocación de servicio y don de servir, una de las muchas piezas claves para que usted pueda estar del otro lado del papel leyendo noticias, denuncias y como el día de hoy: una historia de vida.

En el pasado quedó la figura acotada de Secretaria como persona encargada de recibir, redactar correspondencia. Hoy es una tarea de gestión que requiere mucha más vocación, respeto y discreción. Un breve sondeo dio como resultado la falta de esta figura, y por fortuna esta redacción cuenta con la suya.

Es accesible, tiene mucho trabajo y nunca dice que no, es una persona pacífica y confiable”
Armando Ríos, reportero

Dos teléfonos, una computadora, montones de números celulares y una pila de periódicos por la mañana. Los lentes de Betty, como le decimos de cariño, reflejan una fila de escritorios de reporteros, los más cercanos: Armando y Roxanna, los que más platican; más allá hasta quien ha cabeceado, pero Betty no dice nombres, porque ante todo es discreta.

A primera hora recoge los periódicos, recopila casi 20 portadas de los medios nacionales más importantes del País como parte de sus primeras tareas y de ahí no para. Entre llamadas, facturas, apoyo a fotógrafos, directivos, editores y reporteros, ya sea en físico o por mensajes de texto –usando la cara feliz o el emoji con las manos de algarabía entre sonrisa– siempre hay un gesto sincero, que se agradece, todos lo agradecemos.

Es una parte esencial, eficiente y muy organizada, siempre está de buen humor”
Marco Medina, fotógrafo

La capacidad de resolver situaciones, llamadas, facturas, interacciones, agendar eventos, compartirlos –todo– al instante. Además, sin mencionar las innumerables interrupciones de diferentes miembros del equipo que por cuestiones laborales requieren su apoyo y ayuda, algo que disfruta y jamás niega.

Su historia la llevó a estudiar dando lo mejor, después a trabajar para contribuir con su familia, la carrera de Asistente Técnica le ayudó a salir a flote, a pesar de aventurarse en el terreno de las ventas como parte de una etapa de descubrimiento, esto la ayudó a reafirmar su vocación y aquí está, en redacción desde siete años atrás.

Seríamos un completo caos (sin ella)”
Oscar Morín, editor de Deportes

Disponibilidad, confianza y su temple pacífico la ayudan para continuar siempre con la mejor cara real o virtual en un mensaje. Un respiro para el ritmo demandante de una redacción a la que disfruta pertenecer y a la que se entrega de lleno en horario laboral. Después se desconecta y todas esas sonrisas van dirigidas para su hijo, a quien le dedica tardes enteras con la finalidad de compensar el tiempo de ausencia, como la historia de miles de mexicanos.

Es por ello que damos gracias a cada una de las personas que han hecho del secretariado un oficio de respeto, un trabajo cuyo término se ha quedado corto ante tanta entrega y vocación de guiar a un grupo de personas. Porque así como a nosotros nos toca con Betty, sin ustedes sinceramente seríamos un caos.