Cámara nupcial

Usted está aquí

Cámara nupcial

“Nunca más las vibraciones del sol desearán su almohada de mar profundo donde una vez se casó ella sola”
Jorge Esquinca

 
El más reciente libro que nos entrega el poeta jalisciense Jorge Esquinca es Cámara Nupcial. Con él, se suma a la estirpe de poetas que honran y le cantan a la gran Emily Dickinson, quien escribió casi dos mil poemas publicados después de su muerte (salvo cinco que vieron la luz, tres de ellos sin su nombre). Sus creaciones inyectaron savia y sangre virgen a la poesía mundial, desde Amherst, Massachusetts, el poblado donde ella nació y en donde murió.

Sorprende este nuevo libro de Jorge Esquinca porque avasalla conceptual y geográficamente en sus páginas que con justicia son un amplio mapa que honra la fuerza de la poesía dickinsoniana.

Jorge es miembro del Sistema Nacional de Creadores y se ha destacado por una prolífica y acabada obra poética y de traducción que le ha valido distinciones tan connotadas como el Premio de Poesía Aguascalientes, el Premio Nacional de Traducción de Poesía y becas del Ministerio de Cultura de Francia y de la Fundación Civitella Ranieri de Italia, entre muchos otros.

Este poemario fue publicado por Ediciones Era, la prestigiosa casa que ha sido tomada por un acertado filtro que consagra a cada poeta que recibe entre sus páginas. Cámara nupcial fue coeditada con el Instituto Veracruzano de la Cultura y deja ver el matrimonio entre la danza del lenguaje del poeta con los elementos poéticos, vivenciales y objetuales sobre Dickinson que obtuvo a través de lecturas, viajes y acucioso seguimiento de la vida de la poeta que tiene una flor con su nombre: Encyclia dickinsoniana.

El poeta profesa una reverencia a la poderosa fuerza conceptual de Dickinson, entregándonos para abrir el libro, en la primera parte titulada La maquinaria del glaciar, sendos golpes de luz: “Para alcanzar el corazón de Emilia / traspasé la armadura de un glaciar. / Me abrí paso con diminutos / instrumentos de precisión, brújula imantada a un norte imposible / astrolabio de nebulosa evanescente, zapapico de milimétrico diamante”.

Cámara nupcial se encuentra dividido en ocho partes. Quisiera transcribir aquí parte de los versos del último apartado nombrado Por la vía negativa, ya que tiene registros poderosos que permiten a la luz de la revelación abrevar de la oscuridad y los gradientes anímicos del mundo interior. La voz del poeta se mezcla con la voz de la hechicera y virgen Emily: No eres mi cavidad ocular / No eres mi cavidad nasal / No eres cavidad vaginal. / No eres mi amado de las montañas / No eres mi camino de Damasco / No eres mi Hamlet. / No eres la mancha roja en mi sábana / No eres mi miedo en el cementerio /  No eres mi Ofelia / No eres mi tierna mirada de hospital / No eres mi zapato enterrado / No eres mi látigo”.

No cuento más, solo que Cámara nupcial, es un de lectura infaltable para conocer parte de la obra del gran Jorge Esquinca. Éste, en libro generoso que trae desde su propia voz poética, la admiración y los disparos de hielo eterno que le ha brindado la flor del ártico que es Emily Dickinson. 

claudiadesierto@gmail.com