Cámaras de la IP son obsoletas; capitanes de industria lo saben (I)

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Cámaras de la IP son obsoletas; capitanes de industria lo saben (I)

La mayoría de los llamados organismos intermedios del sector privado -los OISP pa’ los amigos- están caducos y tan o más anquilosados que las centrales sindicales que son criticadas por los representantes de la IP a la luz de los cambios que vienen en materia de legislación laboral e incluso desde antes.

Les platico: En el año 2002, siendo presidente de Caintra, Eduardo Garza T. Fernández declaró que las cámaras debían preocuparse por ser organismos más propositivos que reactivos y adecuarse a los entornos que el país fuera presentando.

El fundador y director de FRISA e integrante del Grupo regio de los 10, explicó que el modelo donde un solo organismo se podía ostentar como el interlocutor de toda la industria había terminado y que, ante la mayor atención que exigen las empresas, las cámaras empresariales que pretendieran sobrevivir debían conocer a mayor detalle las necesidades de sus agremiados, a través de una desagregación en asociaciones locales.

Estas declaraciones del capitán de industria regio se dieron hace 18 años cuando la Canacintra se desafilió del Consejo Coordinador Empresarial, el CCE.

En ese año, los industriales regiomontanos salieron a aclarar que nadan tenía que ver con los canacintros, que  en el 2002 eran presididos por Yeidckol Polevnsky.

A pesar de la advertencia que Eduardo lanzó ese año, hoy, 18 años después, Caintra y la mayoría de las cámaras empresariales…

1.- Siguen siendo organismo reactivos y para nada propositivos.

2.- Monopolizan el diálogo y bloquean a otros que intenten representar también a la industria.

3.- En su afán de servir a los intereses de las empresas grandotas, son ajenas a las verdaderas necesidades de la mayoría de sus socios y…

4.- Lo peor de todo: Sus resultados de interlocución han sido pobres en prácticamente cualquier tema relevante para los pymes.

Esto que les platico no ha escapado a la vista de los capitanes de industria, de aquellos que controlan los hilos del poder económico local y nacional.

Tan ya saben que el modelo de representación que ofrecen Caintra y otras cámaras similares, es de poca incidencia y reamente inútil, que hace unos años tuvieron que idear otro modelo. Esto fue una de las causas que dieron origen al Consejo Nuevo León para la Planeación Estratégica.

Se creó en el 2014, cuando fueron descubiertos los escándalos de corrupción en el Isssteleon, el CECyTE, el Instituto de Control Vehicular, en la Línea 3 del Metro, en la planta KIA de Pesquería, el Proyecto Monterrey VI y sobre todo, en el escandaloso nivel de endeudamiento del gobierno del Estado.

Respecto a estos incidentes, Caintra y el resto de los OISP solo se ocuparon de publicar desplegados y “condenar enérgicamente” la corrupción, pero no tuvieron ni capacidad ni influencia para hacer algo más.

Fue en ese momento cuando los capitanes se dieron cuenta que necesitaban una voz nueva, inteligente, creíble, plural, que pudiera incidir en las decisiones del gobierno.

Tan contundente fue su creación, que el Consejo Nuevo León se insertó en la Ley de Planeación del Estado y fue catalogado como un organismo transexenal, apartidista, consultivo y propositivo en materia de planeación estratégica y su evaluación.

Ha sido tal el respaldo del empresariado a este modelo que las comisiones del Consejo NL son presididas por auténticos capitanes como Antonio Elosúa, Eugenio Garza Herrera, Francisco Garza Zambrano, entre otros, y éstos a su vez se apoyan en académicos y probados expertos entre los cuales -por cierto- no participa ningún personal de Caintra ni de ningún otro OISP. “Por algo será”, diría mi abuela la financiera.

Carlos Salazar Lomelín llegó a presidir ese Consejo y de ahí brincó a dirigir al CCE. Hoy, la conducción fue encomendada a Eduardo Garza T. Fernández, aquel que alguna vez buscó transformar a Caintra.

Entonces, por este conducto me animo a pedirle a Eduardo su intercesión para que desde esa nueva trinchera abogue por miles de pequeños y medianos industriales que claman urgentemente por un organismo que auténticamente los represente.

¿Pueden Caintra y los otros OISP -incluyendo por supuesto al CCE- ver y apoyar en lo que los pymes opinan en materia de transporte, el tema fiscal, comercio exterior, energía y atención a la contaminación? Ya que las cámaras solo atienden a las empresotas, ¿podrá apoyar a las micros y pequeñas, para ayudarlas a crecer sus negocios?

Ojalá este artículo sirva para que Eduardo recuerde aquel momento en el 2002 cuando valientemente asumió el compromiso de transformar al sector de cámaras en NL y el País.

Él sabe de los beneficios que representa para organizaciones como Caintra, su renovación constante y sabe que a esa cámara le urge una... y a la mayoría de las que operan en México también.

Para animarlo, voy a recordar aquí una declaración que hizo el 30 de octubre del 2002, cuando explicó que desde que dejó de ser obligatorio afiliarse a una cámara, los empresarios demandan más servicios y representatividad a los organismos cúpula de la IP.

Ese año -por ejemplo- Caintra tenía en NL cuatro mil 200 afiliados y hoy son alrededor de tres mil 200, de los cuales, 800 son subsidiarias de los mismos grupos empresariales más grandes, como Cemex, Vitro, Alfa y otros por el estilo. En esto, los pymes brillan por su ausencia.

En el 2002, Eduardo se anticipó a lo que está ocurriendo ahora en México, al decir: “Las cámaras industriales tienen que adaptarse a la nueva realidad económica, política y democrática del País. México está viviendo una transformación muy grande”.

Y fue más allá en su predicción, al decir: “Antiguamente los problemas se resolvían con el Ejecutivo; ahora las cámaras tienen qué convertirse en organismos de representación y de proposición, ya que antes eran cupulares”.

CAJÓN DE SASTRE

“El tema da para más porque, ¿dónde queda el rol que las cámaras deben jugar ante la altísima concentración de poder del gobierno de MALO? y ahí tienes a los presidentes de organismos como el CCE y otros, placeándose de lo lindo ante los irresistibles ego-reflectores que apuntan hacia ellos en el Palacio Nacional”, dice la irreverente de mi Gaby… y tiene razón. Mañana aquí la 2ª parte.

placido.garza@gmail.com