Ciudad de México.- Veracruz, como casi todos los equipos que visitan la casa del Cruz Azul, lograron llevarse un punto tras empatar 1-1 en duelo correspondiente a la jornada 15 del Apertura 2015; resultado que los mantiene en la lucha por la calificación y que deja a La Máquina prácticamente eliminados. 

Luego del triunfo conseguido ante Santos en la jornada 14, a Cruz Azul se le abría una leve esperanza de calificar a la Liguilla, sin embargo, tendrían que sumar prácticamente todos los puntos que les deparara el resto del calendario, empezando por el juego de esta tarde ante los Tiburones del Veracruz.

Todo pintaba bien para La Máquina, quien como ya se le ha hecho costumbre, iniciaban ganando el encuentro de forma tempranera, cuando Lucas Silva, héroe del viernes pasado en el TSM , abrió el marcador con un potente derechazo que se incrustó en la cabaña de García, poniendo a soñar a la escasa parcialidad celeste presente en el Estadio Azul.

Las oportunidades fueron escasas, pues a pesar del domino de los locales en los primeros 45 minutos, nunca pudieron acrecentar la ventaja frente a un rival que tampoco ponía mucha resistencia.

Entonces apareció el otro mal hábito de los ahora dirigidos por Tomás Boy, ese que los acompaña desde que Sergio Bueno era abucheado partido tras partido por la afición: dejarse empatar en el complemento.

Al minuto 67, el árbitro vio falta sobre Julio Furch dentro del área cementera, entonces los horrores de cada quince días volvían a asechar la grama del Estadio Azul, y Gabriel Peñalba le dio forma a esos temores al cambiar la pena máxima por el gol del empate para los Tiburones. Un tanto que prácticamente sepultaba las esperanzas de jugar la Liguilla para Cruz Azul.

Los minutos transcurrieron como agua para unos locales que ya no pudieron revertir la situación, buscaron desesperadamente el segundo gol que reviviera sus ilusiones, pero éste nunca llegó.

Los de La Noria se quedaron con 16 puntos y, con solo nueve por disputar, aspiran a 25 créditos que, con una diferencia de menos seis goles, los dejan con muy pocas, si no es que nulas esperanzas, de pasar a la fase eliminatoria.

Los escualos, por su parte, se quedan momentáneamente en la séptima plaza con 23 unidades, pero con un juego pendiente, y nueve puntos por jugar, la calificación sigue dependiendo completamente de ellos.