Escándalo por contratos con Rioboó, parte de la 'guerra sucia': Federico Arreola

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Escándalo por contratos con Rioboó, parte de la 'guerra sucia': Federico Arreola

Andrés Manuel López Obrador, candidato a la Presidencia de la República / Foto: Cuartoscuro
Intentan convertir este tema en un gran golpe contra AMLO, considera el periodista

Luego de que en el tercer debate presidencial el candidato de la coalición 'Por México Al Frente' se lanzara contra Andrés Manuel López Obrador por el supuesto favoritismo del tabasqueño con Grupo Riobóo, los medios y las redes contestaron. 

El abanderado albiazul acusó al morenista de beneficiar con contratos millonarios a la constructora durante su gestión como Jefe de Gobierno de la Ciudad de México. 

Ricardo Anaya expuso que AMLO dio contratos por 170 millones de pesos, sin pasar por alguna licitación. 

Las adjudicaciones directas fueron para la construcción del Segundo Piso del Periférico, informó Verficado MX. 

“No se por qué Anaya quiso con eso sorprender, no hay nada absolutamente chueco; yo no soy corrupto”, contestó a los señalamientos. 

Esta mañana, el periodista Federico Arreola, director del portal SDP Noticias, escribió un artículo en el que asegura que la polémica que se ha desatado tras la revelación de estas adjudicaciones directas es parte de la 'guerra sucia' que existe en contra del candidato presidencial de la coalición 'Juntos Haremos Historia'.

Federico Arreola, director de SDP Noticias / Foto: Tomada de Internet
Algunos columnistas pretenden convertir en un gran golpe contra AMLO lo que dijo Ricardo Anaya acerca de que el candidato de Morena, cuando era jefe de gobierno de la Ciudad de México, contrató por asignación directa los servicios de diseño y cálculo patentados por José María Riobóo. Es guerra sucia, como se verá más adelante. Para probarlo analizaré lo afirmado por uno de tales columnistas, el influyente Francisco Garfias.
 
1. El golpe
Dijo Garfias en Excélsior: “El golpe de Ricardo Anaya al representante de la ‘honestidad valiente’ fue duro, directo, pero quién sabe si efectivo”.
 
Mi comentario: El golpe ha sido “duro” solo en la medida en que así lo han querido ver algunos periodistas. Por esa razón, no será efectivo.
 
2. Se le resbala
Dijo Garfias en Excélsior: “Al Peje todo se le resbala. Nada lo ha movido, hasta ahora, del primer lugar en las encuestas sobre preferencias electorales”.
 
Mi comentario: En efecto, todo se le resbala simple y sencillamente porque en años de guerra sucia nadie ha logrado comprobarle actos de corrupción.
 
3. Asignaciones directas
Dijo Garfias en Excélsior: “Y sin embargo, el abanderado del Frente dejó al descubierto que, cuando fue jefe de gobierno, López Obrador hizo asignaciones directas de obra por 170 millones de pesos. Son contratos ligados a la construcción de los llamados ‘segundos pisos’. que se otorgaron a uno de sus contratistas consentidos: José María Riobóo Martín”.
 
Mi comentario: En efecto, tales asignaciones existieron. Pero era necesario hacerlo así. No, no hubo corrupción. Veremos por qué.
 
4. Inmaculadas
Preguntó Garfias en Excélsior: “¿Las asignaciones sin licitación de Morena son criticables o son inmaculadas porque llevan la bendición de AMLO? ¿No es el ingeniero José María Riobóo Martín el equivalente a Juan José Hinojosa, de Grupo Higa, con Peña Nieto, toda la proporción guardada?”.
 
Mi comentario: Tales asignaciones no pueden criticarse no por el hecho de  llevar la bendición de López Obrador; no son criticables simple y sencillamente porque así debían hacerse. Por razones técnicas y hasta de seguridad no había de otra. Y no, por supuesto que Riobóo no es el equivalente a Hinojosa, para empezar porque Riobóo no es constructor.
 
5. Las patentes
Dijo Garfias en Excélsior: “En una ‘nota aclaratoria’, el Grupo Riobóo reconoce que sí hubo esas asignaciones de contratos por parte del entonces GDF.  Están relacionadas con los viaductos elevados diseñados. ‘Nuestros alcances —dice la nota— abarcan los estudios topográficos. Pero también de mecánica de suelos sismológicos; los diseños y cálculos geométricos, estructurales de todos los elementos que lo conforman, así como otros estudios necesarios para asegurar su funcionalidad y su resistencia’. El proyecto conocido, coloquialmente, como ‘segundos pisos’, se otorgó, vía asignación directa por parte del gobierno, debido a que resultaba la solución más económica y conveniente al interés público. ‘Ésta sólo podía ser otorgada al Grupo debido a que los medios prefabricados están protegidos por patentes y modelos de utilidad regulados por la Ley de Propiedad Industrial e Intelectual. Podemos concluir que la asignación realizada por el entonces Gobierno del Distrito Federal fue legal’, concluye Riobóo”.
 
Mi comentario: Esa es la verdad. Los trabajos técnicos de alta especialización que involucran patentes no se licitan. En la crisis de la influenza habría sido una tontería licitar antivirales producidos por las grandes farmacéuticas. Por cierto, cada vez que hay sismos en la Ciudad de México solo estamos seguros de una cosa: los segundos pisos de AMLO resistirán. Están bien diseñados por los buenos cálculos del ingeniero Riobóo.
 
Con información de SDP NOTICIAS