José Ignacio Pacheco, víctima y activista contra la pederastia clerical, quien hoy se reunirá con jerarcas de la Iglesia católica en la Nunciatura Apostólica de México para exponerse casos de abusos en Coahuila, expuso que tanto él como otros que han alzado la voz han sufrido amenazas.

Dentro de los testimonios que expondrá a representantes del Vaticano en el País y el arzobispo primado de México, Carlos Aguiar Retes, está el de un joven que reside en Chicago.

Esta persona, expuso en entrevista con VANGUARDIA, le aseguró haber huido junto con sus hermanos a raíz de las amenazas recibidas por la denuncia de pederastia que interpusieron ante las autoridades, en la que estaría involucrado el arzobispo emérito de México, Norberto Rivera.

No obstante, agregó que esto todavía tendrá que ser investigado a fondo.

EXIGIRÁN CESAR AMENAZAS
Dentro del encuentro en la sede del Vaticano en México, a la que el nuncio apostólico Franco Coppola no acudirá debido a un accidente, Pacheco adelantó que exigirá cesar las amenazas que ha recibido en su contra, y por las que la Fiscalía General del Estado le ha asignado elementos de seguridad y escoltas en sus visitas a Coahuila para atestiguar en el caso del padre Juan Manuel Riojas, conocido como “El Padre Meño”, de quien es presunta víctima de abuso sexual.

“Le voy a decir que paren las amenazas. Si para ellos es normal violar a un menor de edad, yo creo que también va a ser normal mandarme a quitar la vida”, dijo.

DARÁ DISCUROS ANTE EL SENADO
Además, apuntó que realizará un discurso ante el Senado para tipificar de manera adecuada el delito de pederastia por parte de miembros de la Iglesia, y aseguró que dentro del mismo no “atacará” el trabajo del obispo de Saltillo, Raúl Vera, pues se centrará específicamente en hablar de casos particulares.

Por su parte, la saltillense Aída Badillo dio a conocer que ha recibido casos de abusos en los que se señala a al menos 14 curas de las diócesis de Piedras Negras y Saltillo, y en los que involucra al obispo Raúl Vera, el padre Robert Coogan y a los activistas Noé Ruiz Malacara y Carlos Llamas.