1.- Me he negado a aplicar otro adjetivo que no sea “diferentes” a los tiempos actuales. Al nombrar las cosas, se les aplica una energía específica y nadie desearía describir las circunstancias de su vida personal como “desastrosas”, “angustiantes” o “apocalípticas”. Sin embargo, por mucho que uno cuide el modo de expresarse y mantenga una actitud positiva ante los recientes acontecimientos, la empatía nos exige ver la realidad de aquellos que sufren por situaciones que los abruman.

2.- Uno de esos casos que nos obligan a sentir compasión y no emitir opiniones severas o juicios condenatorios, es el de Xavier Ortiz. El ex integrante del grupo Garibaldi, actor, empresario y ¡dentista!, perdió la vida el pasado 7 de septiembre en lo que fue un lunes demasiado oscuro para él. Dejó de sentirse lo suficientemente fuerte para enfrentar ese día en particular y su vida en general, así que decidió quitarse la vida en la casa de unos familiares suyos donde vivía, de manera provisional, en la ciudad de Guadalajara.

3.- No tiene sentido repasar los detalles específicos de su muerte, pero sí es importante reflexionar un poco al respecto de las circunstancias que lo llevaron a sentir que no había otra salida para alejarse de aquello que lo angustiaba. Aunque siempre trató de ocultar su edad, al final trascendió que había nacido el 9 de junio de 1962, es decir, hace unos tres meses había cumplido 58 años de edad. En 1989, a los 27 años, fue seleccionado para formar parte de aquel grupo que hacía un homenaje pop a la música mexicana: Garibaldi.

4.- Nacido en una familia tradicional, alejada del ambiente artístico y en una época diferente a la actual, Xavier Ortiz siempre sintió la necesidad de llenar las expectativas que los demás tenían de él. Alto, blanco y de ojos claros reunía físicamente todas las características que son tan admiradas en nuestro querido y malinchista país. Esto, aunado a la fama y a formar parte de un grupo musical de “personas atractivas”, lo hacían el hombre perfecto para miles de admiradoras que hubieran dado lo que fuera para ser su pareja.

5.- Pero quizá eso no era lo que Xavier quería. Con el paso de los años, hubo muchos rumores respecto a su vida personal que él mismo hizo callar al casarse con Patricia Manterola, una de sus mejores amigas y ex compañera en Garibaldi. Sin embargo, el matrimonio duró solamente cinco años. Después, y con el evidente deseo de convertirse en padre, se casó con Clarissa de León. Ambos tuvieron al pequeño Xavier pero se divorciaron rápidamente en 2018. En redes sociales Xavier Ortiz dejaba claro que adoraba a su hijo, mientras que sus familiares y allegados confirmaban que el niño era su adoración.

6.- Sin embargo, la madre no dejaba que padre e hijo se vieran con frecuencia. Con el paso del tiempo, Ortiz dejó de tener oportunidades en el medio artístico y durante la pandemia tuvo que dedicarse a vender cubrebocas y gel antibacterial. Antes, había tenido fuertes desencuentros con Charly López, otro ex integrante de Garibaldi, y los medios aprovecharon esto para enfrentarlos en mesas de discusiones al aire. Pero Xavier Ortiz no contaba con la estabilidad emocional necesaria para enfrentar esos montajes publicitarios.

7.- Imagínese una comedia teatral en la que actores adultos interpretan a tres niñas intrépidas, traviesas y de carácter muy precoz que están sumamente interesadas en el romance y buscan resolver todas sus dudas al respecto del sexo, el nacimiento de los niños y la anatomía masculina. Pues muy pronto podrá ver en escena esta divertida propuesta nacida de la pluma del conocido dramaturgo regiomontano Hernán Galindo, producida en colaboración con grandes talentos de la actuación, música, danza, diseño de vestuario, imagen y creación de escenografía. Estoy seguro que todos disfrutarán de esta comedia de niñas para adultos. ¡Muy pronto!