1.- En la ciudad de Guadalajara hice mis estudios universitarios y, durante ese tiempo, mis compañeros al saber que yo soy regiomontano me preguntaban cosas tan imprudentes como “¿Y todas las chavas de Monterrey son como Gloria Trevi?” La tonta imprudencia y la provocación que ostenta este cuestionamiento me hacían sentir muy mal y yo, con la inmadurez propia de la edad, terminé por sentir cierta animadversión por esta famosa cantante. “¿Cómo van a creer que todas las regias andan desgreñadas, con las medias rotas y gritando como locas por todos lados? Estos tapatíos están locos o solamente me quieren molestar”, pensaba yo.

2.- Independientemente de las cuestiones que tengan que ver con el famoso escándalo que tuvo a Gloria de los Ángeles Treviño Ruiz fuera de la circulación por un tiempo bastante largo, tratemos de analizar solamente su personaje artístico, es decir, la personalidad, actitud e imagen que utilizaba (y utiliza) para trabajar y mantenerse vigente. En el año de 1989 cuando ella tenía 21 años de edad y se lanzó al estrellato nacional con la canción Doctor psiquiatra, la Trevi ofreció un personaje irreverente, agresivo y contestatario que rompía completamente con todo lo que conocíamos en nuestro país.

3.- Evidentemente en otros lugares ya habían surgido mujeres empoderadas que pretendían romper con el machismo reinante. En Estados Unidos había ejemplos tan antiguos como Tina Turner y otros que surgieron después como Cindy Lauper y la mismísima Madonna. Pero en México, las cantantes femeninas solistas traían una tradición mucho más conservadora. En los años 60 habían surgido figuras tan dulces e ingenuas como Angélica María para dar paso, ya en los años 70 a talentos como el de Estelita Nuñez y a productos tan bien fabricados como Lucía Méndez. Y ¡por supuesto! teníamos el ejemplo de una cantante tan agresiva como Lupita D’Alessio pero ella ya era una señora hecha y derecha, no una jovencita soltera e independiente.

4.- A principios de los años 80 las cantantes juveniles del momento eran como Daniela Romo cuya mayor “rebeldía” era llevar el pelo larguísimo más abajo de la cintura y cantar cosas como “…celos de tus brazos cuando abrazas a otra chica.” También tuvimos a Yuri, quien empezó con canciones tan inocentes y virginales como Primer amor, Esperanzas y, aunque usted no lo crea o no lo recuerde, Goma de mascar. Total que eran puras propuestas blancas y perfectamente alineadas con el sistema imperante del momento y “las buenas costumbres” de las familias mexicanas. (Cualquier cosa que esto signifique.)

5.- Pero al terminar la década de los años 80 llega la Trevi “enseñando los calzones” y asumiendo públicamente que era sexualmente activa. ¡Algo completamente inédito en nuestro conservador país! En sus conciertos, se bañaba con refresco de cola mientras pasaba a algún varón del público al escenario para desvestirlo y fingir que tenía intimidad con él. “¡Esta muchachita está completamente loca!” decían las señoras más escandalizadas de la Liga de la Decencia. Y no, Gloria era cualquier cosa menos una loca. Sabía perfectamente qué hacer para atraer toda la atención posible hacia su persona y su propuesta musical. Aprovechó el momento exacto en el lugar exacto.  

6.- No estoy tratando de hacer apología de toda la vida de Gloria Trevi ni pretendo afirmar que la fórmula que ella usó para alcanzar el éxito sea el único camino que funciona. En realidad me parece que si, en estos tiempos, apareciera una jovencita vestida de harapos con la misma actitud de la intérprete de Zapatos viejos ya no podría conquistar las mismas cimas que la Trevi hizo suyas. Gloria surgió en un mundo sin internet en el que podía vender ¡calendarios impresos y de gran formato! Hoy las redes sociales y la caída de la televisión, hacen que el camino hacia el éxito sea uno muy distinto al del pasado.

7.- Ahora bien, veamos que ha pasado con Gloria Trevi en estos tiempos. Ella acaba de cumplir 49 años de edad el pasado 15 de febrero y a 11 meses de completar medio siglo de vida ¡ella está físicamente impecable! ¿La ha visto? Con una pulcrísima cabellera larga y rubia, el rostro fresco y una figura espectacular que podría envidiar cualquier veinteañera, es evidente que se ha ciudado con lujo de detalles. Ya no lleva las medias rotas…¡y no lo necesita, obviamente! Además, está a punto de iniciar una gira de conciertos con la también “ochentera” Alejandra Guzmán. ¿El inicio de la decadencia? No lo creo, ni de Gloria ni de Alejandra.  

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