Cruz Azul salió al partido de vuelta derrotado. No fue por falta de motivación, el equipo había perdido el juego antes de salir a jugar por una maldición.

Previo al partido, el exjugador de la Máquina, Héctor Pulido, se atrevió a tocar la Copa, cosa que le ha causado tragedias a muchos equipos en la historia. 

 “La copa no se toca”, es la frase que muchos futbolistas y entrenadores tienen antes de salir a la cancha. 

Al momento de jugar, el Cruz Azul parecía otro equipo, no fue el mismo de la temporada regular, y muchas personas consideran que fue culpa del exfutbolista. 

El exjugador celeste, quien lograra cuatro títulos de Liga con La Máquina y que además anotó un tanto en la primera final del Clásico Joven en la temporada 1971-1972, fue el encargado de llevar el trofeo previo al a la gran final disputada en el Estadio Azteca.

Al final, las Águilas llegaron a 13 campeonatos en la Liga MX para convertirse en el equipo  más ganador del fútbol mexicano.