Ciudad de México .- El gobernador del Banco de México (Banxico), Agustín Carstens, dijo el lunes que si la Reserva Federal de Estados Unidos decide aumentar gradualmente sus tasas de interés este año, México debería seguir sus pasos.

La Junta de Gobierno del Banco de México elevó el 17 de diciembre la tasa de referencia en un cuarto de punto porcentual a un 3.25%, después de que la Reserva Federal subió el rango de la tasa de fondos federales a entre un 0.25 y un 0.50%, el primer aumento del tipo en casi una década.

“Si van a subir las tasas de interés, yo creo que va a ser de manera muy gradual, y eso también debería hacer que nosotros tengamos que aumentar las tasas gradualmente”, dijo Carstens en entrevista con Radio Fórmula.

Señaló que este año, a pesar de que hay nubarrones para la economía como los persistentes bajos precios del petróleo, México podría crecer apoyado en la recuperación de Estados Unidos, su vecino y principal socio comercial.

“Lo más importante es que se consolide la recuperación de la economía de los Estados Unidos porque es lo que nos va a jalar y contribuiría a que se estabilizara el precio del petróleo”, explicó.

El Banxico tiene un pronóstico de crecimiento para la economía local de un rango de un 2.5 a un 3.5% en 2016, mayor a la expansión de un 1.9 a un 2.4% que estimó para el año pasado.
Gasto en defensa del peso

En poco más de un año, el Banco de México colocó 24,721 mdd vía subastas, para dar liquidez al mercado cambiario y estabilizar al peso ante la volatilidad externa.

Del 9 de diciembre de 2014, cuando reactivó estos mecanismos, hasta el cierre de 2015, el Banxico vendió 3.625 mdd en subasta con precio mínimo, 20.696 mdd a través de subasta sin precio mínimo y 400 mdd en subasta suplementaria.

Estos mecanismos son preventivos de la Comisión de Cambios, integrada por la Secretaría de Hacienda y el banco central, para reducir la reciente volatilidad y preservar un funcionamiento ordenado del mercado cambiario nacional.

En 2015, el peso, igual que divisas de economías emergentes, se depreció frente al dólar por la alta volatilidad de los mercados financieros internacionales, debido a la especulación acerca de la postergada alza en las tasas de interés de EU, que se concretó hasta diciembre pasado, y por la caída en el precio del petróleo y de otros commodities, así como de factores externos como el débil desempeño de economías como China, y las crisis de Grecia y Brasil. Agencias