ESTIMADA ANA:
Le escribo porque estoy preocupada por mi hijo de 22 años. Le platico que desde niño siempre se relacionaba con los mayores, tanto amigos como familiares y por lo mismo, siempre se comportaba más maduro que los demás.

Cuando era niño me ayudaba en la cocina, limpiaba su recámara a la perfección, siempre fue inteligente en la escuela y nunca fallaba con tareas, demostraba que era muy responsable desde pequeño. Pero resulta que hace apenas unas cuantas semanas me enteré por mi esposo, que a los 18 había tenido su primera relación sexual con una persona 25 años mayor que él… que además, es conocida mía.

Sin pensarlo ni asimilar las cosas, me fui directo a reclamarle y a regañarlo por haberlo hecho. Terminó por confesarme que la sigue viendo y que además, está enamorado de ella. Según esto, ya tiene varios días de que no la ve, que ella misma fue quien terminó con él cuando supo que yo ya me había enterado.

Desde entonces lo veo siempre triste, creo que realmente está enamorado de ella, pero sigo pensando que lo ideal es que salga con jovencitas de su edad, pues es muy alto, guapo y muy atractivo.

Necesito su opinión, ¿ante la sociedad eso es bien visto y soy yo la exagerada? Me siento muy confundida, no logro asimilar que mi bebé mantenga una relación con alguien que incluso podría ser su mamá.

Le comento además, que desde la semana pasada está viviendo en casa de uno de sus amigos, tan enojado estaba cuando le reclamé, que me dijo que se iría y lo cumplió.

Extraño a mi hijo, no sé qué hacer para que regrese pero sobre todo no sé qué hacer para que entienda que no puede relacionarse con personas mayores, que no es lo normal. Gracias, 

Nora.
 

ESTIMADA NORA:
Creo que estás sufriendo por el llamado síndrome del Nido Vacío. Es real y válido que se sufra cuando los hijos de van de casa, sea cual sea el motivo. Lo que no es real y válido es que a sus 22 años aún le tengas que decir qué hacer y qué no hacer.

Primero, porque a su edad ya debería de estar lo suficientemente maduro para saber que está bien y qué no lo está y de nosotros, solo necesita consejos, no órdenes, tratándose de sus cosas tan personales o íntimas como en el caso de tu hijo.

Una cosa es que te preocupe o te moleste que así sea y otra cosa muy distinta es que lo regañes por lo que está ocurriendo desde hace tres años. Por obvias razones reaccionó de esa manera, yéndose de la casa. Que claro, tampoco se justifica su comportamiento haciendo un berrinche y amenazando con irse y finalmente cumplirlo.

Creo que es momento que te deslindes de la vida personal e íntima de tu hijo, deja que aprenda de sus actos, que asuma las consecuencias de cada paso que da y que aprenda las lecciones que la vida le tiene preparadas.

Créeme que no eres ni la primera ni la última mamá que está pasando por problemas con sus hijos y por lo mismo, debes de aprender que tu hijo tiene la capacidad y el derecho de saber elegir lo que más le conviene, todo es cosa de gustos y preferencias.

El tema en cuestión sería en todo caso la mujer con quien se relacionó, que es además, conocida tuya. Debió valerse de la relación entre ustedes para al menos tratar de detener al muchacho, pues para empezar, ella ya era mayor de edad consciente de las intenciones de tu hijo, que además, de acuerdo a lo que dices, recién llegaba a la mayoría de edad.

Te repito de nuevo, por lo que pasó o está pasando tu hijo es normal hasta cierto punto. No hay muchachito que no sienta esa curiosidad por jugar a ser grandes cuando aún son adolescentes. El punto importante aquí es nuestro papel como padres para orientarlo y aconsejarlo a tiempo, no cuando ya cometieron el error, sobre todo en temas de sexualidad.

ANA