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Mirador 29/10/16
La violeta es flor de invierno.
Su azul es diferente al de los plúmbagos y muy distinto del de las jacarandas.
Es azul cielo, pero no es azul celeste.
Es azul mar, pero no es azul marino.
Es azul ojos de mujer, pero no es azul amor.
Su azul sólo puede describirse diciendo que es azul violeta.
No hay otro azul con un azul así.
Flor favorita de mi madre, para mí es azul recuerdo.
La primera violeta apareció ayer en el jardín. Tuvimos algunos días fríos. Quizá la florecilla pensó que el invierno había llegado ya y se apresuró a nacer. Cuando abrió los ojos el Sol brillaba, esplendoroso, en lo alto. Ahora la violeta no sabe qué hacer. Se esconde entre las hojas y no quiere ver, ni que la vean.
Yo paso junto a ella y hago como que no la he visto. Vendrá otra vez el frío y la violeta será otra vez violeta, y su azul será otra vez azul recuerdo. Entonces la miraré, y la violeta me llenará el alma con su majestuosa pequeñez.
¡Hasta mañana!...