Usted está aquí
‘Mis papás no aceptan mi relación a distancia’
ESTIMADA ANA:
Desde hace casi dos años tengo un novio que no es mexicano, mantenemos una relación a distancia, nuestra comunicación siempre ha sido a través de internet, redes sociales, etc. Personalmente nos hemos visto solo un par de veces cuando yo viajé a Canadá.
Nos llevamos tan bien y tenemos tantas cosas en común, que queremos compartir nuestras vidas, planear un futuro juntos y por supuesto algún día casarnos. El problema y lo que nos impide precisamente llevar a cabo nuestros planes es precisamente que él no está en México y por lo mismo, mis papás no aceptan la relación, creen que todo es ficticio, me dicen que seguramente él tiene otra pareja en Canadá y cosas por el estilo.
Las veces que he viajado a Canadá se han molestado mucho a pesar de que yo misma he costeado ambos viajes, pues trabajo y he ido ahorrando para los boletos de avión. Ellos me dicen que si verdaderamente le intereso, él tendría que venir a verme, que mejor me busque a alguien de aquí, que hombres hay muchos y que no siga aferrada a una relación de lejos, que nuestra relación no tiene futuro.
Escucharlos decirme tantas cosas realmente me duele en el alma, me angustia muchísimo y me pongo triste, pues no soporto estar mal con mi familia, con mis seres queridos, pero por otra parte no quiero conocer a nadie más, lo quiero solo a él.
Mi mamá terminó por confesarme que en realidad a lo que le temen es que lo nuestro funcione tan bien, que un día al casarnos, me vaya con él a Canadá, esté lejos de ellos y que por lo mismo, yo vaya a sufrir por la distancia.
Yo en parte los entiendo, son mis padres y es normal que se preocupen por mí, pero una cosa es preocuparse y otra muy distinta es ponerse conmigo en ese plan, a veces hasta enojados y con una actitud muy difícil, hay días en que ni me dirigen la palabra, me hablan de mala manera, me miran mal, me critican si gasto de mas, si hablo mucho tiempo por teléfono, me echan en cara cuando gasto de más, total, para ellos todo es pelea últimamente.
Aún hay más, la novedad de esta semana es que mi novio quiere venir dentro de dos semanas a visitarme y ya me advirtieron que por ningún motivo me dejarán salir de la ciudad a quedarme en algún lugar cerca que él quiera ir a conocer, que si salgo, será de ida y vuelta, nada de quedarme en otro lado y menos si andamos solos.
Ya me advirtieron que si no me gusta ni modo, que me aguante, pero que ellos no lo van a permitir. En resumen, lo único que quiero es ser feliz y es realmente duro ver a mi papá peleando conmigo en cada momento, me siento impotente, agobiada y sufro mucho.
Otra cosa que me tiene preocupada es que de tantas cosas que le he platicado a mi novio, él me dijo que no quiere conocerlos, que le parece increíble que me hagan tanto daño y me traten de esa manera siendo que ya no soy una niña. Me siento entre la espada y la pared, yo lo único que quiero es ser feliz con mi novio y que mis padres lo acepten y se sientan felices al verme que yo lo soy ¿acaso es mucho pedir?
LINA
ESTIMADA LINA:
Situaciones como la que estás viviendo solo las entenderás cuando tengas tus propios hijos, créeme. Y es que solo quienes somos padres de familia podemos entender a la perfección lo que expones en tu carta.
Has de saber que es tanta nuestra preocupación por los hijos, que a veces nos cegamos, no queremos que nadie les haga daño y evitamos a toda costa que sufran. Sí, también sé que este tipo de comportamientos a veces resultan contraproducentes, pero es algo que hasta cierto punto, muchos no podemos evitar.
Trata de comprenderlos, hacerles sentir confianza, seguros de que estarás bien porque estás decidiendo por ti misma, que estás actuando de una manera inteligente y madura, que estás lista para ser independiente, tomar tus propias decisiones y asumir las consecuencias y riesgos que ello implique. Con eso basta, los papás necesitamos saber que están listos para vivir su vida pero ustedes como hijos son los encargados de demostrarlo.
Ánimo, no te aflijas, estos es solo un episodio en tu vida que pasará pronto, te lo aseguro.
ANA