No ha madurado y ya se pudrió: el IEC,otro IEPC

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No ha madurado y ya se pudrió: el IEC,otro IEPC

Bastaron siete meses de operación para que el Instituto Electoral de Coahuila (IEC) terminara por parecerse a todo aquello que había reemplazado en su día: el tristemente célebre Instituto Electoral y de Participación Ciudadana (IEPC) que desapareció en 2015.

Los nuevos consejeros electorales tardaron el primer semestre del año en resolver cuánto iban a ganar, dónde se iban a sentar y en qué mesa iban a sesionar. Satisfechas las necesidades primarias, alimento y techo, les tocó enfrentarse a lo verdaderamente importante: los casos relacionados con la vida interna de los partidos políticos en este momento que aún no hay proceso electoral.

Y es ahí donde acabó el encanto.

En la primera intervención relevante que les tocó calificar, luego de siete meses en el cargo e igual número de sesiones, debían determinar si sancionaban o no al Ayuntamiento de Torreón y particularmente a su Alcalde, Miguel Riquelme, por descontarles una parte del salario a los empleados municipales para destinarlo posteriormente al Comité Directivo Estatal del PRI.

Por unanimidad, el Consejo General declaró “infundada” la queja del PAN, asentada en el expediente CQD/002/2016.

No era cualquier asunto de trámite. El 26 de noviembre de 2015 el Instituto Nacional Electoral despachó el expediente CG982/2015 al IEC para que, “en el ámbito de sus atribuciones”, determinara “lo que en derecho corresponda”. Hasta hubo una medida cautelar del INE, como consta en el Acuerdo ACQD-INE-48/2014, mediante la cual ordenó al Presidente Municipal realizara “las gestiones necesarias a fin de suspender los descuentos o deducciones a sus trabajadores”. 

Incluso el tema fue abordado en algunas entrevistas a los entonces aspirantes a consejeros electorales para Coahuila, el año pasado, y su posición crítica fue determinante para escoger a los siete designados por el Consejo General del INE, el 30 de octubre de 2015.

Es decir, se trataba de un caso de relevancia estatal. Y hace unos días los funcionarios designados decidieron que todo está correcto, que Riquelme siga reteniendo el 3.5 por ciento de la nómina y que contribuya con ése dinero ajeno a granjearse una eventual candidatura en el PRI.

Una chulada de resolución. Para ellos no existe violación a la normatividad electoral de Coahuila, “en apego al principio de legalidad”. Etcétera. Escribe Federico Campbell en su libro “La Invención del Poder”: “se aprovecha siempre la ambigüedad de la ley. Se utiliza siempre la coartada de la legalidad”.

Por lo demás, la historia es cíclica. 

En 2010, cuando hacía sus pinitos como consejero electoral del IEPC, Manuel Gil Navarro fue sorprendido por VANGUARDIA cuando se comunicaba por chat con el representante del PRI durante una sesión, y le informaba el sentido de la votación en general.

Hace unos días, en la referida sesión del IEC del 24 de junio, la presidenta del Consejo, Gabriela de León Farías, fue captada ‘texteando’ previo a cada intervención por los comunicadores presentes, “como si recibiera instrucciones”, según la crónica periodística en redes sociales. Luego del incidente, una mano anónima ordenó se retirasen los reporteros  gráficos de la reunión que, justo es recordarlo, es pública.

¿Nota usted un paralelismo en las historias?

Seis años después, con una Reforma Electoral de por medio, se repiten las formas y sólo cambian las personas y el género. Un Club de Tobi por un Club de Jardinería.

Cortita y al pie

En el IEC la plantilla laboral es prácticamente idéntica al IEPC, y su Consejo General ya fue cooptado por el grupo (de la Facultad de Jurisprudencia de la UAdeC, para mayores señas) que anteriormente facturaba por asesorías. Los mismos de siempre, pues.

Irónicamente uno de los argumentos para exterminar a los institutos locales habían sido las “elecciones viciadas, manipuladas e inequitativas” que producían éstos (y sus empleados, por consecuencia lógica) de acuerdo con la Exposición de Motivos que acompañó a la Reforma Electoral de 2014.

El siempre vigente Gatopardo: cambiar todo para que nada cambie.

La última y nos vamos

Un último detalle: a la fecha el IEC no ha sido invitado a la mesa del Congreso del Estado, donde se impondrán las reglas para el próximo proceso electoral que ya inicia en noviembre próximo. “Ni siquiera han sido convocados a foros o reuniones para el consenso, como sucede normalmente para el lanzamiento de nuevas leyes” (VANGUARDIA, 26/06/16).

Ni como institución, ni como presuntos especialistas, ni como tercero interesado. Al contrario: son simples espectadores pasivos. Sin voz ni voto.

Acaba de nacer, no ha madurado y ya se pudrió. ¿Qué esperar del árbitro para las elecciones más importantes en la historia de Coahuila que se avecinan en 2017?

@luiscarlosplata