Saltillo.- Dicen que el perro es el mejor amigo del hombre. Que es uno de los animales más nobles del reino animal y puede, incluso, entender los estados de ánimo de sus amos. De ellos también se cuenta que tiene un oído tan agudo que es capaz de escuchar cualquier sonido a una distancia de entre 225 y 230 metros... que son tan cariñosos como celosos, y pueden ser tan leales como enemigos.

Existen historias inmortalizadas por perros, como Hachiko, un can de raza Akita que permaneció durante 10 años esperando el regreso de su dueño, el profesor Eisaburo Ueno, quien murió de un paro cardiaco mientras daba clases en una Universidad de Tokio en 1925. El animal esperó tanto tiempo hasta que murió en marzo de 1935 en la estación del tren donde cada tarde esperaba a su amo. 

Otra de esas historias increíbles es la de un pastor alemán de 12 años que todos los días pasaba de la plaza central del pueblo San Donaci —sur de Italia— donde se reúnen los ancianos, a la iglesia y se instalaba al lado del altar, con autorización del párroco.

Tras la muerte de su dueña, una anciana que había adoptado al perro a quien después llamó Tommy, el animal se acostumbró a acudir al templo cada vez que sonaban las campanas o veía llegar un coche fúnebre. Tommy esperaba paciente en la puerta, pero desde que un día el párroco le permitió quedarse dentro, el perro no dejó de participar en bodas, bautizos y funerales.

Estas historias han trascendido por el comportamiento que han tenido los animales hacia sus dueños; sin embargo, también se cuentan otras de terror donde los mejores amigos del hombre han sido capaces de hacer tanto daño a sus dueños hasta causarles la muerte. 

Una de esos relatos trascendió en Monclova, donde Chavita, un niño de apenas cinco años fue atacado en el rostro y en distintas partes del cuerpo por un perro de la raza pitbull. Algunos testigos cuentan que el animal sorprendió al niño y se le fue encima, hasta matarlo. 

El personal del Departamento de Control Canino de Monclova determinó que el perro, llamado Sambueza, fuera sacrificado con una inyección que no le ocasionaría mayor dolor. 

El 31 de enero de este año en Torreón, Néstor Daniel, de siete años, fue víctima de bullying al ser encerrado con un perro que le ocasionó mordeduras en el 80 por ciento de una de sus piernas. La prensa local documentó que los doctores intentaron salvarle su pierna, aunque la perdió. 

En un ejido de Torreón, una niña de cinco años, también fue atacada por una perra pitbull y le ocasionó lesiones graves en una de sus piernas. 

En esa misma ciudad, un estudiante de secundaria de 14 años, fue presionado por otro grupo de compañeros a que entrara al área reservada para los canes en el Colegio Cervantes. Julio César, el adolescente que “comprobó su valentía”,  fue atacado por perros que estaban dentro y recibió mordeduras en la frente, mano, brazo, glúteo, muslo y tobillo. 

Aunque no todos han corrido con la misma suerte de resultar heridos pero quedar vivo. En León, Guanajuato, Maximiliano, de un año con nueve meses, fue atacado a mordidas por uno de los dos perros que tenían amarrados en el patio de su casa. Una vecina intercedió para liberarlo de la mandíbula del animal, pero el niño no logró sobrevivir.

Piden mayores penalidades para los dueños de animales feroces 

Juan Salas Aguirre, jefe de Control y Bienestar Animal en Saltillo, sugiere que el Congreso local legisle para imponer penalidades a los dueños de animales feroces que hayan atacado a alguna persona.
Actualmente el Reglamento de Control y Bienestar Animal de Saltillo contempla en el artículo 20 el sacrificio de animales cuando éstos tengan conductas agresivas, feroces o peligrosas por cuestiones de raza o especie, por ataque a humanos o a otros animales después de ponerlos en observación y ser revisados por un Profesional.

Además el artículo 21 del mismo reglamento refiere que “todo propietario de algún animal doméstico que haya agredido físicamente a una persona deberá entregarlo a la autoridad competente y en su caso, cumplir las medidas de seguridad que se le impongan”. 

De acuerdo con datos de la Jefatura de Control y Bienestar Animal en Saltillo, en 2014 se registraron mil 200 ataques de perros en Saltillo; para 2015 la estadística disminuyó a mil.

Las razas caninas más feroces son: pitbull, dálmata, bull terrier, rottweiler, doberman y pastor alemán, aunque depende de la fuerza de la quijada que tenga cada animal. 

Para destacar

> El pasado 26 de abril una mujer y su hija fueron atacadas por una perra de raza pitbull en la colonia Roma, de Saltillo.
> Cuando la Policía llegó al lugar, aseguraron al can para llevarlo a Control y Bienestar Animal; la fiera nunca llegó a su destino.
> En el camino, según afirma un oficial, arrojaron al animal a un arroyo cerca del basurero municipal, días después el jefe de la Preventiva Municipal, Clemente Yáñez, afirmó: “El perro se nos perdió”, escapó a los policías, esto, a pesar de que Control y Bienestar canino dotó a la Preventiva Municipal de jaulas para trasladar a perros peligrosos.

El mejor amigo...

> El Congreso local estudia imponer penalidades a dueños de perros feroces que hayan atacada a alguna persona.
> El Artículo 20 del Reglamento de Control y Bienestar Animal contempla el sacrificio de los perros siempre y cuando sean demasiado agresivos.
> El Artículo 21 refiere que todo propietario de animal que haya atacado a una persona, deberá entregarlo a la autoridad competente para su estudio.
> Las razas más agresivas son la pitbull, dálmata, bull terrier, rottweiler, doberman y pastor alemán.