El gobernador Rubén Moreira Valdez, aseguro aquí que en lo que en los tres meses que resta de administración, continuaran trabajando para que no se instalen casinos, y todo negocio que le deje ganancias a la delincuencia organizada.

Durante la destrucción de drogas, alcohol, y objetos del delito, entre los que destacan chalecos antibalas apócrifos, comparo a Tamaulipas, Chihuahua y Nuevo León, con Coahuila, al decir que mientras en estas entidades los delitos se han disparado, aquí se mantienen a la baja.

“Otra de la preocupación personal es el discurso político de algunos actores, que para apoyo de grupos específicos alientan políticas públicas perniciosas, como el regreso de los casinos”, afirmó.

Dijo que otra de las preocupaciones personal que tiene todavía mayor, es la simpatía que esto genera en algunos sectores de la población y que los vimos en las votaciones pasadas.

“No me explico cómo regiones tan importantes que sufrieron tanto, sean seducidos bajo ofertas políticas que digan que regresen los casinos, que se vaya la policía, giros negros para niños; que regresen los table dance o la prostitución”, aseguró.

Responsabilizó del apoyo de ciertos grupos con poder económico para que esas ofertas políticas sean difundidas.  Consideró que deberían de difundirse propuestas que vayan encaminadas a que no regrese todo lo que implica negocios de financiamiento para los grupos del crimen organizado.

“No podemos pedir paz sino somos firmes en ciertas cosas. Podemos engañarnos, pero pedir paz no se puede”, afirmó.

Otra de las preocupaciones del gobernante es que el discurso de esos “tipos”, genere las simpatías, por lo que reitero dirigiéndose al Secretario de Gobierno, Víctor Zamora a continuar con la coordinación con el gobierno federal, con los alcaldes, y no ceder ante la tentación de una política “cachavotos”.