El defensa Rafael Márquez, capitán de la selección de México, se someterá a un proceso de rehabilitación intensa, después de que se le diagnosticara una compresión de la raíz nerviosa a nivel lumbar, informó hoy su equipo Atlas de Guadalajara.

"La semana que viene verán a Rafa haciendo trabajos progresivos, todo dependiendo de la evolución del tratamiento. Puede ser que este tratamiento no sea suficiente y ahí se valorará qué procede", dijo el jefe médico del club, Ángel Gutiérrez.

Márquez, de 38 años, viajó la semana pasada a Houston para una evaluación y con la intención de evitar una cirugía.

El diagnóstico fue una radiculopatía al nivel L5S1. Los médicos le hicieron un bloqueo epidural, mediante la aplicación en la zona afectada de un analgésico y un antiinflamatorio.

El sábado regresó a Guadalajara y, después de 48 horas de reposo, inició el lunes un proceso de rehabilitación que se hará diariamente en doble turno, según anunció Gutiérrez.

"Si fracasa el bloqueo y no es suficiente, ahí nos sentaremos con la selección nacional también y el área médica con el jugador para ver qué sigue, todo apuntando para que cuando esté el Mundial (Rusia 2018) Rafa esté al cien por ciento", dijo el argentino Luis Fosatti, kinesiólogo del equipo.

El regreso a las canchas de Márquez dependerá de su evolución, aunque su equipo estima que será dentro de dos a tres semanas.