Miles de feligreses visitaron ayer la parroquia de San Judas Tadeo para agradecerle los milagros concedidos. Al santo de las causas difíciles, como también es conocido entre los católicos, le encomiendan los ayude con la economía, pues el precio del dólar también ha impactado en los bolsillos de los creyentes. 

Roberto Carlos Campos, sacerdote en el templo, dice que la gente pide lo que por sí misma no puede conseguir y necesita, pues se trata de cosas que para muchos pueden ser superfluas pero que para la familia es algo muy elemental. 

“Aunque se dice que la economía va creciendo el caso es que muchas familias están viviendo al día y muchas veces ni si quiera con los recursos necesarios para poder subsistir, y eso angustia e intranquiliza mucho a las familias. Nunca como hoy me ha tocado ver a tantas familias que oran porque se levante la situación económica de sus familias. 

“Hay mucha gente que pedía a San Judas que les concediera trabajo, y vienen a traer su ofrenda y a elevar sus plegarias en acción de gracias pero con una cara de insatisfacción porque aunque tienen trabajo, no es digno con los sueldos, pues son pseudoempleos”. 

El párroco insiste en que cuando la gente atraviesa por un clima de bonanza económica, laboral y social, le encuentran sentido a su camino y a su vida, por lo que la petición ha sido mayor, incluso, que la enfocada a la inseguridad, la violencia intrafamiliar o el índice de suicidios.

Aunque desconoce cuántos han sido los feligreses que han visitado el templo durante el viernes, asegura que han sido miles que acuden desde varios puntos de la ciudad, pues la fiesta es casi equivalente a la del Santo Cristo del Ojo de Agua y Santo Cristo. 

La misa principal fue oficiada por el obispo emérito Francisco Villalobos al mediodía, donde bendijo casi uno a uno a los feligreses que se acercaban. La quema de pólvora inició a partir de las 10:30 de la noche.