El uruguayo Carlos Sánchez, volante de los Rayados del Monterrey, está convertido en el mariscal de campo que conduce el liderato de su equipo en el Clausura 2016 del fútbol mexicano.

Sánchez llegó para darle fuerza al medio campo del Monterrey y su influencia ha llegado hasta la ofensiva ya que en los siete partidos en los que ha jugado acumula cuatro goles y es el segundo mejor artillero del equipo detrás del argentino Rogelio Funes Mori, quien suma cinco tantos.

El volante se apuntó sus dos últimos tantos el sábado en la goleada de su equipo sobre el Veracruz por 5-1, en la que abrió y cerró la cuenta de su equipo y además dio un pase para el cuarto gol de su equipo que anotó el colombiano Edwin Cardona.

En su primer tanto, el colombiano Dorlan Pabón llegó a línea de fondo por la derecha y mandó el balón al centro del área donde un defensa del Veracruz intentó despejar el balón pero el esférico le rebotó a Sánchez.

En el segundo, el uruguayo recibió un pase de Pabón dentro del área y lo remató con la pierna derecha y al rematar fue desviado por un defensa.

De esta manera, Sánchez está cumpliendo de forma destacada su segunda etapa en el fútbol mexicano tras su paso por el Puebla entre el 20013 y el 2014.

El exjugador del River Plate, de 31 años, llegó al equipo como refuerzo para el Clausura mexicano y de inmediato asumió el liderazgo dentro del grupo que dirige el argentino Antonio Mohamed.

En la jornada también destacó el delantero argentino Mauro Boselli, quien también firmó un doblete con el León que goleó por 5-1 al Toluca.

Otro argentino que sobresalió fue Matías Alustiza del Puebla, quien firmó un doblete en el triunfo por 3-2 sobre los Dorados de Sinaloa.

En la jornada se anotaron 34 goles, nueve de mexicanos y 25 de extranjeros, entre ellos 13 de argentinos, cinco de paraguayos, dos de colombianos, dos de uruguayos, uno de ecuatorianos, uno de estadounidenses y uno de franceses.