Elementos de Fuerza Coahuila asustaron a una mujer que convalece de una operación, quien estaba junto a su hija de 12 años, desatando una balacera en la colonia Urbivilla en Ramos Arizpe. 

Durante la madrugada del pasado lunes, policías estatales llegaron al domicilio de Paola –como pidió ser identificada por temor a represalias. Frente a su casa tenía una camioneta Ford Lobo con placas americanas, la mujer alegó que el vehículo no es utilizado, ya que espera regularizarlo.

De acuerdo a las declaraciones de la familia, Fuerza Coahuila fue directamente por la camioneta. 

Los oficiales llegaron golpeando la puerta y pidiendo a los inquilinos con palabras altisonantes que salieran. 

Como las patrullas llevaban apagadas los estrobos, la mujer pensó que eran ladrones que querían meterse a su hogar, como había sucedido en otras ocasiones con sus vecinos, por lo que tomó un arma, propiedad de un familiar que es parte de una corporación de Seguridad.

Dio unos disparos al aire, pensando que de esa forma podría ahuyentar a los hombres, pero los jenízaros de inmediato reaccionaron y balearon la casa, según relató la mujer.

Paola pudo ponerse de pie, pese a la operación en una pierna que tuvo hace unos días, tomó a su niña y salió por el patio, donde brincó la barda para refugiarse con una vecina.

Sin embargo, elementos estatales la ubicaron y se la llevaron detenida, quedando a disposición del Ministerio Público durante 48 horas; ayer denunció que los oficiales otorgaron otra versión. 

“Cambiaron toda la versión ante el Ministerio Público, fueron a decir falsedades, que me encontraron circulando, cuando me pararon los ataqué y luego me metí a la casa abriendo la puerta a patadas, eso no es cierto”, explicó Paola, quien tiene que caminar con un bastón.