Pero no se puede decir... Que muchos son los "embarrados". La hilera de testigos que uno a uno han estado declarando semana a semana, han dado "santo y seña" con fecha, lugar y cantidades que repartía en dólares a funcionarios, autoridades y políticos de todos los niveles, para que lo dejarán trabajar libremente en México, y claro que todos esos personajes lo niegan, porque no son tan tontos para aceptar que fueron sus cómplices.