Pero no se puede decir... Que hicieron el "ridículo". En una de las mañaneras el Primer Mandatario se le hizo fácil atacar de lleno a Felipe Calderón, acusándolo de una y mil cosas, pero para pronto el ex presidente sacó las uñas y se defendió como gato boca "arriba", negando todo, y en son de reto le dijo que presentara las pruebas ya que él es una blanca paloma, que hasta le gritó: usted me hace los mandados, que barbaridad, con esas actitudes se rebajaron a un vulgar "pleito" de callejón.