Para variar, la muestra de que los Patriots son casi imbatibles jugando en casa con Tom Brady en los controles --con todo y las ausencias de Rob Gronkowski y Danny Amendola-- es mala señal para el resto de la AFC, pensando en la postemporada.

Los Chiefs barrieron a los Raiders y ahora no sólo controlan la AFC Oeste sino que también marchan como el segundo sembrado en la conferencia, sin embargo, las lesiones podrían lastimar sus esperanzas de llegar lejos en los playoffs.

Sin sonar alarmista, los Cowboys han venido a menos en los últimos compromisos. Es momento que Dak Prescott y Ezekiel Elliott salgan a flote para que sea un momento pasajero y no permanente.

Lo más rescatable de la derrota del pasado jueves es que todo pintaba para ser una paliza a favor de Kansas City, pero Oakland consiguió apretar suficiente los tornillos para convertirlo en un juego más o menos competitivo.

Los Giants están encendidos en el mejor momento de la temporada y demostraron que le tienen tomada la medida al que hasta hace una semana era considerado el mejor equipo de la NFL, los Cowboys.

Lo único que debemos reprocharle a Mike Tomlin del domingo es cómo no se dio cuenta más temprano que ‘Big Ben’ no estaba en su mejor día y Le’Veon Bell vivía el mejor de su carrera.

Detroit no gana lindo, pero las victorias cuentan igual en la NFL; eso sí, en algún modo van a requerir algo más de su ataque terrestre.

La derrota en Lambeau pudo haber estado presupuestada, la paliza debió contemplarse en algún escenario, pero ¿las cinco intercepciones de Russell Wilson? Eso debe tener preocupado a más de uno en Seattle.

Fue un golpe de autoridad. Los Rams cuentan con una gran defensiva y sumaron 42 puntos sin su mejor hombre a la ofensiva: Julio Jones.

No hay un equipo más encendido en este instante que los Buccaneers, cuya defensiva --para sorpresa de muchos-- es quien salvó su último encuentro.

El margen de error para Denver cada vez es más estrecho y partidos como el del fin de semana en Tennessee no hacen nada más que generar dudas alrededor de los campeones defensores de la NFL.

Green Bay parece estar de vuelta para el cierre de la temporada, pero el cierre con tres juegos divisionales parece ser demasiado para una defensiva mermada y un Rodgers disminuido.

La pérdida de Ryan Tannehill por lesión, sea cual sea el tiempo que esté fuera, pone todavía más presión en Jay Ajayi y un ataque terrestre que ha venido a menos desde mediados de campaña.

Los Titans vienen de su victoria más importante en mucho tiempo, ahora están en la pelea por la cima divisional y con su sólido ataque terrestre podrían ser un rival bastante incómodo en enero.

Ryan Kerrigan selló un triunfo que ayuda en la moral del equipo, pero el puesto de comodines luce más que complicado para los de la capital.

La sorpresa más positiva para Houston es que consiguen ganar pese a un Brock Osweiler que es firme candidato como la peor contratación de la temporada.

Tras su derrota en Foxborough, los Ravens se han despedido del liderato en la AFC Norte y también podrían haberle dicho adiós a la postemporada.

Pese a una temporada de altibajos, Minnesota todavía controla su destino. El juego en dos semanas en Green Bay será clave.

Dudo que suceda algún día por el modo en que se maneja, pero Andrew Luck tendría todo el derecho de criticar abiertamente el pobre trabajo de su entrenador en jefe y su gerente general.

Rex Ryan insiste en que su empleo no está en riesgo, esa es una de las frases más recurrentes en entrenadores en jefe a punto de ser despedidos.

Gozar de una semana de descanso en pleno cierre de temporada no le viene mal a nadie, pero es que no puede llamársele de otra manera cuando te enfrentas a los Browns.

Entre lo más rescatable en una campaña perdida para Carolina es que Jonathan Stewart es prácticamente garantía de encontrar las diagonales, semana a semana.

Los Cardinals están a tiempo de comenzar a pensar en los prospectos del draft y las probables bajas para la próxima temporada porque el 2016 se terminó antes de lo esperado.

Pese a estar fuera de postemporada, Philadelphia puede tomar como año positivo el 2016 y el futuro luce promisorio en una aguerrida división.

Como si las lesiones de principio de temporada no fueran suficientes, este domingo se sumaron a la lista de San Diego Melvin Gordon y Joey Bosa.

Los Saints necesitan un milagro para colarse a la postemporada y es muy poco probable que suceda si la ofensiva continúa sin producir.

No busco hacer leña del árbol caído, pero se tardaron mucho en poner a Bryce Petty. No es que sea solución, pero es una buena manera de prepararse para el futuro.

Matt Barkley está presentando argumentos para ser considerado parte de una competencia en el campamento de entrenamiento del próximo verano por el puesto titular definitivo en Chicago; falta por determinar contra quién sería esa competencia.

A los Rams les tomó cinco años darse cuenta que no iban a llegar a ningún lado con Jeff Fisher como su entrenador en jefe... más vale tarde que nunca.

Cada semana que pasa Gus Bradley en los controles, me cuestiono si está convenciendo a Khan que le de otro año.

Los Niners han alcanzado el punto de dejar escapar partidos en donde perder tiene un alto grado de dificultad, como sucedió esta semana ante los Jets.

El regreso de Robert Griffin III no fue suficiente para evitar que los Browns sigan en una caída libre que podría prolongarse más allá de esta temporada.