Triple alerta

Usted está aquí

Triple alerta

Se alerta a la comunidad humana frente al triple riesgo del invierno veinte-veinte. No solo Covid sino también gripe e influenza.

Y frente a los 65 millones de infectados en el mundo, se vuelve a plantear el dilema: O gente o casa. O quedarse o salir. Reuniones solo familiares que convivan o con invitados. Los semáforos con tendencia hacia el rojo indican hacer alto a las no sanas distancias.

Se cierran puertas de tiendas y sitios de reunión y se recomienda cancelar las reuniones grupales tan acostumbradas en este tiempo de Adviento.

Las vacunas precoces llegan prometiendo solo tres meses de inmunidad y algunas en plan de experimentación todavía, antes de la aplicación generalizada.

Se insiste mucho en que la llegada progresiva de la vacunación no significa atenuar las precauciones siempre recomendadas porque una persona vacunada inmune puede seguir siendo transmisora.

CONFUSIÓN Y MEZCOLANZA

Como todos los años (y más en este) se está manifestando la impaciencia y la precipitación. Se quiere hacer ambiente de fiestas navideñas cuando todavía la fecha está lejana. Se quiere hacer ambiente de Navidad en pleno Adviento. Los más acelerados ya están enviando felicitaciones, ya armaron árbol de Navidad y ya tienen al Niño en el pesebre. Olvidaron la corona de Adviento en que se van encendiendo, una a una, las velas correspondientes a las cuatro semanas preliminares.

En el tiempo de Adviento se va dando una alegría gradual. En nuestra cultura se acentúa en los días de las posadas. Se viven como nueve días que desembocan en el gozo de la Nochebuena. Todo a su tiempo, pues sin confusiones ni mescolanza.

PROTECCIÓN A VULNERABLES

Se anuncia que el personal de los hospitales será privilegiado con recibir -antes que todos- la vacunación que se acerca. Son los que viven en constante riesgo de contagio. Y nacionalmente es inaceptable el número de quienes han fallecido en el cumplimiento de su heroico servicio.

Son vulnerables no solo médicos y enfermeras sino también todos los empleados domésticos encargados de limpiezas ya que son facilitadores en muchas otras urgencias de las labores diarias. Han de emplearse todos los recursos disponibles para que no tengan que improvisar su salvaguardia con insuficiencias que pueden tener pésimas consecuencias.

CEREBROS CON MANTENIMIENTO

Son los cerebros un patrimonio inestimable de cada nación. Se están difundiendo, por especialistas neuropsiquiatras, las necesidades cuya satisfacción da por resultado la salud mental. Se requieren: vínculos afectivos humanos, optimismo, ejercicio físico, aprender algo nuevo y diferente, no jubilarse de lo que apasiona, nutrición saludable y balanceada, sueño de buena duración, serenidad sin estrés y saber también no hacer nada para que el cerebro haga -en segundo plano- su trabajo de síntesis y coordinación.

ESPÍRITUS VICTORIOSOS

El tiempo de distancia protectora, de interrupción de habituales actividades no ha de caer a un empobrecimiento espiritual. Puede haber poca atención selectiva y caer en quejumbre, en acusaciones, en desánimos, en violencias, o en auto-victimización.

Cada época tiene su desafío. No ha de verse como calamidad, como amenaza, como razón suficiente para evadirse de todo compromiso por cualquier pretexto. Se requieren espíritus victoriosos que no nieguen los retos coyunturales ni sus propias incapacidades y estén dispuestos a vivir alegremente en un presente sin derrotas íntimas.

La ascensión del Adviento hacia la Navidad es, para los creyentes, un tiempo fuerte de afinación interior. Y quien no tenga fe puede recorrer -con elegancia- caminos de un humanismo con proyección universal...