Perdonadme lectores, pero soy el mismo de siempre. El eterno amargado y aguafiestas. ¿Voy a cambiar? Pues no, tengo 55 años sobre la tierra y eso del cambio ni se me da y menos lo voy a buscar hoy de viejo. Así con mis toxinas, penas, desdichas y pluma ácima en materia política y social, me siento a gusto. Muy a gusto. Otra cosa es mi vida personal, familiar, amorosa y claro, mi vida literaria de la cual le cuento siempre en el sabatino “Café Montaigne”. Pero, en el calendario aprieta eso llamado elecciones a realizarse el 1 de julio. Por lo cual, aquí viene el anuncio: de aquí y a días de la elección, voy a estar escribiendo mayor parte textos sobre la insana y primitiva política nacional y la de vecindario, con miras a que usted si hace favor de leerme, tome lo que le sirva, deseche el bagazo y medite su decisión de votar. Si en algo puedo contribuir, me sentiré halagado de ello.

Y claro, la disculpa también es y va en ese sentido. Muchos, hartos lectores me dicen una y otra vez que la política, amén de ser insustancial, es tan pedestre y primitiva, que sí, sale sobrando abordarla y es menester mejor enfocar verbo, ojos y lectura en situaciones, estampas y hechos verdaderamente importantes. Y de primera importancia es lo siguiente por ejemplo: la muerte del gran escritor y periodista Tom Wolfe, la muerte del director de cine Milos Forman, la muerte del filósofo tan mexicano como ibérico lo era, Federico Álvarez; de primera importancia es presentar aquí nuevas letras a un viejo mito: los primeros 20 años de la muerte de Frank Sinatra. Comentar aquí la nueva edición anotada del famoso diario de Álvar Núñez Cabeza de Vaca, “Naufragios”, el cual usted lo sabe, es de los primeros humanos en dejar testimonio escrito sobre el norte. Es impostergable agregar letras a la serie de la cantante de jazz, Nina Simone en Netflix,  en base a buenos libros que sobre mi novia, se han escrito. Es urgente abordar el lote grandioso que han comprado en España, de textos a mano y mecanografiados del par de hermanos poetas y dramaturgos, Antonio Machado y Manuel Machado… esto que es de verdad importante, lo vamos a dejar de lado por un tiempo. Pido disculpas. Muchas disculpas por ello. 

¿De qué vamos hablar de aquí a días de la elección? De lo siguiente: el 1 de julio se elige Presidente de la República, lo que se ha dado en llamar (tristes bautizos, patéticos bautizos, pues) en la “elección más importante en la historia de México”, la “elección histórica” y un sinfín más de nombres y apelativos que son basura. ¿Por qué lo digo? Es tan “importante” e “histórica” esta elección, que una mujer, la única en la contienda, se rajó, le sacó al bulto y “declinó.” 

ESQUINA-BAJAN
Margarita Zavala (candidata independiente, lo que eso signifique al día de hoy), largó simpatizantes, equipo, ruta de campaña y boletas ya impresas y se rajó. Pero ojo, lo dijo primero ante Televisa en uno de sus programas de “Talk Show” más socorridos y con animadores muy vistos, y sólo 12 o 14 horas después, le avisó al Instituto Nacional Electoral.

Nadie le tiene respeto a las instituciones ni a sus directivos, sea este Lorenzo Córdova o la secretaria Gabriela de la León. Son letra muerta, fruta podrida. Margarita Zavala lo sabe y por ello no fue a youtube, no lo dijo en twitter ni vía email, sino que fue a Televisa y renunció a su candidatura y sin pedir permiso a esos miles de ciudadanos que quieren un “cambi”. ¿Deberían de ponerle un castigo ejemplar? Absolutamente sí. En próximo texto lo abordaré. La televisión sigue marcando agenda, pobres de los cibernautas. Nada nuevo.

¿De qué vamos hablar de aquí hasta el día de la elección? Para mi pesar, de la insana y pedestre política de campanario que por aquí se desarrolla en su último tramo rumbo a la urna. Usted lo sabe: no voy a donde no me invitan y no abro la boca cuando no me lo piden. ¿Es obligación que los candidatos me inviten? Absolutamente no. A muchos sinceramente no les caigo nada bien y ni me hacen en el mundo. Otros, generosamente me han pedido que los acompañe en sus reuniones, giras y actos de campaña. He aceptado varias invitaciones con miras a contarle usted lo que he visto. 

Y  aflora eso que ahora se llaman “datos duros”, en fin, con esta nueva jerga. El pasado 19 de marzo, se realizó el 1er. debate entre los candidatos al Senado por Coahuila. Y como todo mundo dice que es una “elección histórica”, pues de tan histórica e importante… nadie los vio ni escuchó. Debatieron Jericó Abramo Masso (va a ganar, está obligado a ganar si quiere seguir levantando la mano por la gubernatura. Él lo sabe), Esther Quintana y Eva Galaz. Era tan importante, histórico y trascendental el acto, que lo vieron… 200 humanos en la página en línea del INE. Le digo, lo importante es otra cosa. Le voy a presentar aquí el abordaje de la campaña del Cowboy Urbano, Manolo Jiménez; la infame asoleada que me di con Ricardo Aguirre (candidato a diputado Federal) en pleno desierto, el buen café compartido con José María Morales (“Chema”), candidato a la Alcaldía de Ramos Arizpe, la también ingrata asoleada que me di con Jericó Abramo Masso…

LETRAS MINÚSCULAS
En fin, le presentaré aquí mi opinión y disección de lo que vi y va a pasar. Tome usted lo que guste de mis letras.